editorial
La Ayuda a Domicilio elimina la lista de espera
La Diputación de León inició ayer la tramitación de alta para 296 personas que estaban en lista de espera para acceder al servicio de Ayuda a Domicilio. La decisión supone que todas las personas que lo soliciten y que cumplen los requisitos necesarios tendrán acceso este servicio.
El servicio que presta la institución provincial beneficia a personas en situación de dependencia y tiene como objetivo atender las necesidades de la vida diaria e incrementar su autonomía, posibilitando la permanencia en su domicilio el mayor tiempo que sea posible. A pesar la reducción de recursos por parte de las administraciones —la Junta aportaba el 90% de la financiación—, la Diputación seguirá atendiendo al mismo número de usuarios, unos 2.600 en toda la provincia. Es encomiable su esfuerzo en este y en otros aspectos de la atención social, que siempre han puesto a la institución muy por encima de sus responsabilidades reales en este aspecto. Y es digno de elogio que, en una situación de severos recortes en todos los campos, los políticos hagan algo por evitar que esta crisis castigue con mayor dureza a los ciudadanos que menos tienen y que más necesitan.
Esta misma semana se conocía que el 27% de los ciudadanos están en riesgo de pobreza en una evolución creciente. La responsabilidad de los políticos y la solidaridad de los ciudadanos es indispensable para afrontar lo que queda de travesía, pero siempre con la idea muy clara de que por encima de todo están las personas.