EDITORIAL
El adiós a otro pozo histórico para el carbón
La agonía que sufre el sector del carbón está acabando con las grandes explotaciones que durante décadas marcaron la economía no solo de las cuencas mineras sino de toda la provincia de León. El cierre de Santa Cruz supone el adiós al penúltimo gran pozo de la provincia, que ahora únicamente conservará como explotación de interior de gran volumen el yacimiento de la Hullera en la comarca de Gordón.
Desde que en 1991 se cerró la explotación de Hulleras de Sabero poco a poco han ido entrando en el olvido los grandes pozos de las diferentes cuencas. Julia en el caso de Fabero o Calderón en el valle Laciana, que durante años y años dieron trabajo a miles de personas, forman parte ya de la historia minera de la provincia que cada día se ve más amenazada sin ofrecer un futuro ni tampoco una alternativa.
La vieja explotación de Victoriano González adquirida en los años 80 por Victorino Alonso es la siguiente en unirse a esa lista de cierres y además con el valor simbólico de ser la última mina de interior que quedaba abierta en la cuenca Fabero-Sil.
Hace apenas unos meses el grupo Santa Cruz centraba todas las miradas durante las reivindicaciones mineras del verano, con el largo encierro que se produjo en sus galerías. Y ahora se acerca el adiós a una explotación sobre la que existían muchas esperanzas de futuro para que el valle del Sil mantuviese el pulso económico. El final de otro pozo histórico supone una pérdida importante para León.