Diario de León

TRIBUNA

Desbancarización de la economía española

Publicado por
María Jesús Soto. Directora de Inversis Banco en León y el inversorinquieto.es
León

Creado:

Actualizado:

En múltiples ocasiones hemos afirmado que esta crisis supondrá una profunda transformación de la sociedad y de la economía española. Por eso hablamos de lustros e incluso décadas, de trabajo y cambios por delante. Uno de los más importantes será la pérdida de peso y poder, de la banca española en la economía doméstica.

El origen de la presente crisis ha sido financiera, transformándose a continuación en económica y social. En nuestro país en dos años y medio, hemos pasado de tener 53 entidades financieras a tener 12, y veremos cuantas sobreviven, al final de la limpieza que está haciendo el mercado. El Banco Central Europeo ha dicho expresamente que uno de los problemas estructurales de la economía española es la dependencia del crédito a las empresas de la banca nacional. No en vano, en torno el 80% del crédito que tienen las empresas ha llegado vía entidades financieras y sólo un 20% por el mercado de capitales. A efectos comparativos podemos afirmar que en EE.UU. sucede justo todo lo contrario. La principal fuente de financiación para las empresas es el mercado de capitales, algo que en España tendrá que ir produciéndose en las próximas décadas.

Ahora que tenemos claro el camino a seguir para ayudar a financiar el tejido empresarial, que nos ayudará a reducir el paro y pondrá en marcha el crecimiento sostenido a la economía española, la pregunta es ¿cómo se consigue eso? ¿Cómo hacemos que el ahorro de los ciudadanos llegue a las empresas, en lugar de engordar los plazos fijos o productos bancarios?

La respuesta es:  con una base sólida de conocimientos financieros que permitan a los ahorradores tener confianza en las empresas como generadoras de riqueza para todos, al tiempo que vayamos fortaleciendo los mecanismos y vehículos para canalizar ese ahorro, de forma sencilla y transparente.

Este enorme y trascendente reto no es sólo para España, sino también para muchos países de Europa. Para conseguirlo, hay mucho trabajo que hacer con los sistemas educativos en materia económica, con las empresas en su forma de gestionarse y de comunicarse con el público al que deberán dirigirse para captar el ahorro, a los legisladores poniendo en marcha los vehículos adecuados, a los supervisores para hacer su labor de control y a los intermediarios financieros para avanzar en su puesta en marcha, de forma lenta pero segura. Las prisas o la improvisación serán malas consejeras, al igual que lo será el inmovilismo de quienes tienen que ponerlo en marcha, de forma decidida. La sociedad demanda soluciones y respuestas, pero también tendrá que estar preparada para aceptar  explorar nuevos  caminos, así como su apoyo con el esfuerzo, puesto es fundamental para los cambios que en estos decisivos temas se van a tener que producir.

Con todo esto se abre un camino profesional muy importante para los gestores y consultores de las empresas, para los educadores ayudando desde niños a entender los asuntos económicos desde la práctica y el entusiasmo, para los intermediarios financieros que tendrán una nueva vía de negocio, para la que necesitarán profesionales que ahora no tienen, a los que tendrán que ir encontrando y formando.

Aunque el camino será largo, que duda cabe que hay muchas posibilidades de conseguirlo. La reforma educativa refuerza el aprendizaje de la economía, las empresas están dispuestas a hacer los cambios que sean precisos para sobrevivir, y los jóvenes encontrarán el camino para labrarse un futuro prometedor con todas las oportunidades que se les irán poniendo delante. Así es como se saldrá de la crisis de forma consistente, aunque no inmediata.

tracking