EDITORIAL
El leonesismo se juega su futuro en política
La decisión de Javier Chamorro de apartarse de la política abre en el leonesismo una etapa que será crucial para conocer sus opciones de volver a convertirse en una fuerza importante en el mapa político de la provincia. Después de 14 años como concejal Chamorro, actual portavoz municipal, pretende que se elija un nueva cúpula en la Unión del Pueblo Leonés en los próximos meses porque alega que ya no tiene fuerzas para seguir al timón del partido. Y lo hace entregando incluso su acta como concejal para apartarse de verdad y permitir que la UPL pueda decidir plenamente su futuro.
El leonesismo como fuerza política ha tenido una relevancia importante para León al servir de altavoz para sus reclamaciones pero también el balance se hace mucho más gris cuando se analiza su evolución y sus decisiones a la hora de participar en gobiernos especialmente en la capital de la provincia.
Para León la recuperación de una formación de cariz leonesista que se mantenga dentro de unos cauces democráticos y con la reivindicación como objetivo es siempre importante. Canalizaría una inquietud que existe en la ciudadanía y también una necesidad de que León se deje oír porque los representantes de los partidos políticos mayoritarios no han sido muy activos precisamente en este campo frente a gobiernos de su mismo signo.
La desunión es hoy por hoy uno de los mayores problemas que tiene el leonesismo para servir a la sociedad.