Oído televisión

Me cuenta el colaborativo Alfredo Puente, toda una autoridad dentro del mundillo que gira en torno a la industria audiovisual, que su amigo David Navarro, coautor junto a Alfredo de la página web del Musac, va a estrenar en Canal+ una serie titulada Nada que celebrar . Hasta aquí algo escasamente noticiable, al menos para mí que solo veo en la pequeña pantalla partidos de fútbol y películas antiguas, pero la cosa cambia al enterarme de que su anterior trabajo, también emitido en la cadena de pago, fue Oído Caníbal, un producto que causó sensación por su perfecto diseño y mejor ejecución, al estilo del legendario HBO. Y si lees la opinión de la crítica a propósito del recital de carcajadas en castellano que se avecina, la opinión es sorprendentemente unánime: si la cadena Ser sentencia que el talento de David es admirable, otros proclaman con enardecida entrega que nos encontramos ante un auténtico bombazo televisivo.

Nada que celebrar es una comedia ácida e incorrecta sobre un grupo de actores, centrándose en la historia de tres de ellos que empiezan desde lo más bajo, permanecen en la profundidad, y todo apunta a que jamás saldrán adelante. De ahí el título: no son famosos, no consiguen llegar a fin de mes, y ni sus amigos y familiares se explican por qué se esfuerzan tanto en algo que jamás conseguirán. La primera temporada consta de 6 capítulos de 25 minutos, duración muy breve si tenemos en cuenta el modelo habitual, con la intención de no extender las tramas y analizar más bien las situaciones. Al margen de su faceta como creador de ficción, David Navarro ha trabajado en los gabinetes de comunicación de La Moncloa y el Ministerio del Interior, aparte de colaborar en El País . Lustrosas credenciales para un hombre que se ha ganado el respeto entre los adictos a los productos televisivos inteligentes.