Responsabilidad política en el caso San Cayetano

La Junta, o más concretamente la Consejería de Educación, acaba de conseguir algo realmente insólito en el desarrollo de la actividad política: poner de acuerdo a PSOE, IU, UPL y al propio PP, además de la Diputación y el Ayuntamiento de la capital, en defensa de la continuidad en San Cayetano de la actividad del Centro Rural de Innovación Educativa (CRIE) de León, la escuela hogar y el centro de FP de hostelería, convertido en referencia nacional en esta rama formativa y sobre el que sin embargo planea incluso el traslado a otra provincia.

Bajo el pretexto de la notificación de que la cesión —un tanto arbitraria y no sustanciada formalmente— de las instalaciones por parte de la Diputación a la Junta expira el último día de 2014, probablemente buscando una negociación en legítima defensa de los intereses de la institución provincial, la Consejería de Educación, al grito de nos vamos porque nos echan y tenemos que estar prevenidos, prepara el cierra de la escuela hogar, el traslado de los alumnos del CRIE a Ponferrada y ahora también el de la escuela de cocina y hostelería «a otro centro de FP de la comunidad autónoma».

Frente al enconamiento político —«mienten con absoluto descaro», afirmó ayer el vicepresidente de la Diputación— debería imponerse el diálogo, la sensatez, la coherencia y la responsabilidad, entendiendo que los paganos de la situación —que tuvo su precedente en el caso similar del Sagrado Corazón— son los alumnos, obligados a un traslado innecesario e injusto.