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León

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C on Cervantes hemos topado, amigo Sancho. Al Ayuntamiento de León le ha llegado una factura de 2.000 dólares desde el Instituto Cervantes de Nueva York, procedente del alquiler de una sala en 2009 por el anterior equipo de gobierno, cuando fueron a promocionar lo nuestro, y de paso, supongo, a ver si se cruzaban en la Quinta Avenida con Jennifer López. Sorprende que tal puñado de dólares -alquilar nuestro Auditorio cuesta más- no estuviese ya pagado, dado que se trataba de una actividad institucional vinculada a la promoción de nuestra ciudad en el exterior; es más, sorprende cómo no se pagó allí mismo, sacándose la cantidad del calcetín o del cinto. Alguien aquí subestimó a los de allá. Que si aquello está muy lejos... instituto no sé qué... «la razón de la sinrazón que a mi razón se hace, de tal manera mi razón enflaquece, que con razón me quejo de la vuestra fermosura». Craso error. Don Emilio, hágame caso y ordene pagar hoy mismo esa factura. León no es Detroit, usted ha dicho recientemente, vale, ok, pero no lo convirtamos en Chicago. Desde el Instituto Cervantes de Nueva York no van a mandarnos al cobrador del frac, pero saben hacer ofertas que no puedes rechazar, entre ellas patear un lugar de cuyo nombre no quiero acordarme. Los de letras, puestos a cobrarlas, siempre tenemos un primo lejano en Brooklyn.

Lo lógico es que cualquier actividad municipal en el extranjero se pague de forma inmediata. Al rey Ordoño le puedes pedir que vuelva mañana a cobrar su factura o dentro de unos siglos, pero no a quien está en otro continente. Alguien del anterior equipo, y damos por hecho que no fue el hoy ex alcalde, concluyó aquello de: «Si tan largo me lo fiáis». Pero no hay océano lo suficientemente grande.

Para el Ayuntamiento tal cantidad es casi simbólica, incluso en esta época de vacas famélicas. Lo malo es que son muchas cantidades simbólicas juntas. Promocionar León en Nueva York no dio para mucho, pero el error no fue el viaje en sí mismo sino que cualquier puñadín de dólares además hay que pagarlo, en tiempo razonable y manera. Al menos, esperemos que la comitiva se topase en la Quinta con Jennifer López. Allí no tienen tanta historia pero hay también grandes monumentos.

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