Eternos ellos

E l alcalde de León ha recibido en su despacho al trío Los Panchos, que actuará el próximo año en el Auditorio. Dado que don Emilio vestía como ellos, con sobrio traje oscuro y con muy similar corbata, parecía que iban cantar amarraditos los cuatro espumas y terciopelo. No se estila, una pena. Ah, el bolero, gran género. Y de mucha actualidad. En el PSOE leonés quien no entona uno es porque algo tiene en la garganta, aunque en vez de «me importas tu/ y tú/ y nadie más que tú» están en una etapa más proclive al “me importo yo/ y yo/ y nadie más que yo”. ¿Así se quede el infinito sin estrellas o que pierda el Bernesga su inmensidad? preguntará el lector romanticón. Pues eso parece. En la UPL tampoco es que hayan encontrado el nirvana. Los leonesistas son más de la canción autóctona, pero, dado que el manager del trío es de aquí, Javier Chamorro ha hecho una excepción y ha entonado «debemos separarnos/ no me preguntes más/». Lo ha clavado, sin desafines, con buena voz y caballerosidad. El bolero es lo tremendo tomado con calma. Con dinero o sin dinero, aunque eso ya sea letra de ranchera, como lo de amarraditos. No obstante, lo del vil metal mejor no meneallo, no vaya a ser que el concierto de Los Panchos lo tengan que dar finalmente el alcalde con el concejal de Cultura y el de Hacienda. Por ejemplo, cantarían ante el respetable público: «... que le dio luz a mi vida/ apagándola después/ hay que vida tan oscura/ sin tu amor no viviré». Pero ya habrá tiempo para escribir de la iluminación navideña.

La continuidad de este trío viene a ser como la de James Bond. Cuando el actor ya no está en edad de arrojarse en pleno vuelo desde un avión y utilizar de paracaídas al pelícano que pasaba por allí, entonces, se le busca un sustituto, manteniendo el número 007, que es franquicia y leyenda. Hacen bien Los Panchos, eternos ellos y sus canciones.

Se agradece esta promesa de grandes boleros que jamás caducan. «Si tú me dices ven/ lo dejo todo», estará en este momento asegurando algún Romeo leonés, creyendo que cita a Shakespeare. Y ella: «¿Incluso tu película preferida de Chuck Norris?».Golpe bajo ante la que no cabe otra que responder: «Julieta, maja, no confundas el bolero con el tango».