Congreso de UPL: un, dos, tres, responda otra vez

Ante un Congreso que llevará a una nueva dirección a UPL, quiero hacer alguna reflexión.

Un ligero análisis de los resultados cosechados por UPL (1991-2011) no deja lugar a dudas. Los leoneses han apoyado de forma importante a UPL. Le han dado su confianza. Hay una base sociológica leonesista indudable. Pero una política de pactos errónea y las luchas cainitas internas han propiciado un severo castigo electoral al partido.

Me merece especial atención lo ocurrido en el año 2007: con la alcaldía de la ciudad de León en juego, se le entrega al PSOE, por medio de un pacto (firmado, fundamentalmente, en dirección a conseguir la comunidad autónoma leonesa, el documento no tiene desperdicio, está en el Diario de León de aquellas fechas). Quiso el destino que tres meses después de la firma de aquel documento y con un presidente del Gobierno leonés, señor Zapatero, se produjera la Reforma del Estatuto de la Comunidad Autónoma de Castilla y León. Objetivos autonómicos (pasos hacia un reconocimiento territorial de la Región Leonesa) conseguidos por UPL en dicha reforma y en virtud al pacto suscrito: ninguno. El miércoles 6 de noviembre de 2013 publicaba don Eduardo Sendino en Diario de León un artículo donde hacía la siguiente apreciación, referente al papel del señor Zapatero y a este episodio de la reforma del Estatuto: «…nunca quiso dar el más mínimo paso en pos de la autonomía de la región leonesa, que desde la atalaya de la presidencia del Gobierno oportunidad extraordinaria tuvo y la dejó pasar, y ello además con el beneplácito y la complacencia de los políticos y bases del PSOE leonés que por no quedar fuera de la foto han sido cómplices de la moderna traición a la Región Leonesa.». Comparto su análisis señor Sendino, pero ¿qué me dice de los tres concejales de UPL (señores Chamorro, Cabezas y Pardo) continuando en el equipo de gobierno? ¿Sería beneplácito o complacencia con la inhibición del señor Zapatero, sólo sensible a que «Cataluña es nación» y «Andalucía realidad nacional»? Me da la risa cuando oigo que Abel Pardo es un leonesista radical, un radical, en ese caso no queda en la poltrona, qué oportunidad perdida para el surgimiento de un «líder leonesita de verdad», sólo con «irse para su casa» hubiera sido un «paso de gigante», ¿Se imaginan una rueda de prensa de los tres concejales de UPL abriendo los telediarios nacionales? «La ciudad del presidente del Gobierno puede perder el Alcalde socialista»; vaya una oportunidad desaprovechada de enterarse en toda España del bochornoso e injusto proceso autonómico leonés y lo consecuente y justificada que es la reivindicación leonesista. El valor cualitativo de la ciudad de León fue muy grande en ese mandato (2007-2011), pero, ¿logramos algo? Fíjese, señor Sendino, yo hubiese preferido el mayor logro, como usted, en aquella reforma del Estatuto, pero, en último caso me hubiera conformado con que hubiese quedado abierta una vía legal y posible de llevar a la práctica que, llegado el momento, una provincia (León, Zamora, Salamanca, Burgos...) de la comunidad autónoma que padecemos pudiese abandonarla mediante la voluntad de sus ciudadanos. Claro, llegan las siguientes elecciones (2011) y debe ser dificilísimo argumentar a los electores, a los leonesistas más difícil todavía, que UPL sirve para conseguir «algo de lo fundamental» (lo que nos diferencia de otros partidos). Pues «poner la farola, asfaltar la calle o podar el rosal del jardín» lo hacemos parecido al resto de partidos. Si no conseguimos «algo» cuando somos equipo de Gobierno y quitamos o ponemos alcalde en la ciudad del presidente del Gobierno ¿Cuando lo conseguiremos?

Mire, amigo/a lector/a de Diario de León, la función de la actividad política es de lo más respetable y elogiable, para quien quiere dedicar un tiempo de su vida a ella. Pero, una cosa es ser político y otra, muy distinta, es ser, un ocupa del cargo público.

El próximo candidato a presidente del Gobierno por el PSOE lo van a elegir los militantes y simpatizantes en unas primarias, ¡Qué lujo! ¡Enhorabuena! ¿Cuánto tardarán los otros partidos en ir por el mismo camino?, ¿Cuanto tardará UPL en elegir a sus candidatos por este método?

Miro para atrás y veo lo poco que conseguí en tantos años, días, tantas horas de conversación y ¡hasta de lloros! para que UPL fuera mejor ¿Verdad, Melchor? Sólo me queda el consuelo de que lo intenté.

He sido un privilegiado en UPL (cuatro años concejal de la oposición en San Andrés del Rabanedo, 2003-2007). He quedado en deuda vitalicia con el partido pues pienso en la cantidad de militantes valiosos que se han limitado a pagar la cuota y trabajar sin ningún beneficio. Vaya para ellos mi respeto, agradecimiento y admiración.

Me duele mucho cuando me para gente por la calle (gente sencilla, trabajadora, humilde, que «vive lo del leonesismo») y que ¡ha sufrido tanto! tanta decepción, tanta traición, tanta frustración. Ojalá les llegue algún día la alegría que se merecen.

Cambiar para avanzar. Romper con el pasado, para recuperar el voto de los leoneses y servirlos como se merecen.

Con el único ánimo de contribuir, ojalá lo consiga, a que en UPL se reflexione y se encamine en la dirección de ofrecer lo mejor a la sociedad leonesa.