Ayudas agrarias que impulsen la producción

La Junta y las agrupaciones de productores del campo tienen claro que el futuro de la agricultura y la ganadería pasa por su profesionalización. Y por eso en su propuesta para la reforma de la PAC defienden de manera conjunta la figura de un perceptor de ayudas que sea productor y no un mero cobrador de dinero público.

El acuerdo parece lógico: Que las ayudas dejen de ser meros subsidios que pagan los baldíos de tierras y que sirvan para incentivar y conseguir un campo más actualizado y más competitivo, y en el que se eleve la productividad para afrontar el futuro con garantías.

La polémica sobre el número de perceptores es, según los sindicatos agrarios, falsear la cuestión. Defienden que al final el dinero repartido por el campo será el mismo aunque los perceptores sólo serán quienes trabajen realmente en la agricultura y la ganadería. Todo parece cargado de una justicia hacia la que es difícil poner trabas aunque en las asociaciones de productores temen que en el Ministerio de Arias Cañete no se comparta este criterio.

En León hay unas 12.000 personas que cobran en estos momentos fondos de la PAC. El acuerdo firmado ayer en la Comunidad no supone recortar este número. De lo que se trata es de incentivar que produzcan realmente porque existen cauces legales que lo hacen factible, incluso para quienes están ya jubilados. El criterio de que exista actividad real debería imponerse y Arias Cañete tendría que compartirlo.