Sin multa a quien las recoge

Ayer tocó recogida de datos en el foto-rojo del cruce de la avenida Padre Isla con la calle Cruz Roja de León. Lo realiza una furgoneta blanca de la empresa que tiene la concesión para gestionar estos controladores del tráfico en la capital de la provincia. Acude a primera hora cada varios días y curiosamente aparca sobre la acera en las proximidades de la torre en la que está situado el foto-rojo. Con las cuatro ruedas sobre la acera para poder conectar un ordenador portátil desde el que se opera la cámara que está situada en ese semáforo que da paso desde Cruz Roja de León hacia la avenida Álvaro López Núñez. Un aparato eléctrico que está diseñado para poder imponer multas a quienes no respetan los colores del semáforo pero curiosamente incumpliendo las normas de tráfico que prohíben aparcar sobre una acera aunque ésta sea bastante ancha.

En estos momentos está pendiente la reubicación de este foto-rojo y del de Miguel Castaño. Serán colocados en Padre Isla y Mariano Andrés. Y serán instalados dos nuevos, uno en la avenida Doctor Fléming y otro en Miguel Castaño, pero en la zona de la glorieta de Santa Ana.

También San Andrés dispondrá de dos foto-rojos.