Por lo natural

Tiene una buena bronca montada el gobierno hasta con su propio partido por un quítame allá esa ley que prohibe edificar en los parques naturales.

Menos en Picos de Europa.

Tampoco hay lágrima en Monfragüe.

Son los dos únicos parques nacionales que cuentan con poblaciones dentro de su perímetro (y en los dos late la misma lengua troncal: junto a Monfragüe se cuenta y se canta en un dialecto leonés, el serraillanu , que preservaron los pobladores medievales salidos de estas montañas a buscarse la vida que aquí negaban, como hoy).

Pero el suspiro de alivio con que en Valdeón y Sajambre acogieron la noticia sugiere una letanía de temores fundados, pues no poco de lo construído ahí se ha ido levantando con un temerario alarde de insensatez, como pintarrajeando los huevos de la gallina de oro, pues eso es este monumento natural y grandioso, el parque más espectacular de España, aunque es gallina que hace sus puestas en otros nidales (Potes, Cangas, Covadonga), pues al macizo leonés sólo caen diezmos de toda la carrada de gente que llega a Picos. El negocio turístico hace caja allí y aquí es maldición desde el inicio, pese a que el área mayor y más sorprendente del parque sea precisamente este macizo occidental... hay mucho más que ver en lo valdeonés y sajambrino, en las gargantas del Cares o Sella, en puertos, senderos, ganados o fauna, en bosques, neveros, aguas... pero ¿no supieron dar aquí ese plus que contrarreste los mejores accesos y servicios de las vertientes asturiana y cántabra?...

¿Qué habría que ofrecer, pues, para que la masa turística de pallá crea necesario hacer sólo unos pocos kilómetros pacá porque sería imperdonable perderse esto?... Pues autenticidad, lo natural, lo característico... dicho: lo auténtico (ya tan raro o falso)... así que ¡ojo con eso de edificar !... si ese paisaje fue moldeado por la interacción humana y silvestre, con agriculturas y ganaderías que equilibraron el duelo, quizá lo atinado sería preservar esos modos rústicos antes de apostarlo todo al turismo y la edificación . Y sobre todo, lo que asumió Ramonín en el Divi : «Plato... y trato», no hay otro secreto.