Camas

No nos cuentan lo que pasa. No nos dicen la verdad. O nos la dicen a medias. Y ya se sabe que una media verdad es una mentira completa.

La polémica de este verano en el Bierzo ha sido el cierre de treinta y seis camas en la unidad de Medicina Interna del Hospital Comarcal. Treinta y seis camas innecesarias, según las explicaciones de la Junta de Castilla y León. Treinta y seis camas vacías. Sin pacientes. Y sólo cabe una conclusión si damos crédito a la versión oficial; en verano, los usuarios de la sanidad pública enferman menos. O se aguantan el dolor en su casa. Las vacaciones aparecen como la época del año más saludable. Y será que la salud, como el fútbol, es un estado de ánimo.

Al Servicio de Sanidad de Castilla y León, sin embargo, no le importó el estado de ánimo de los bercianos que desconfiábamos del cierre. Miles de firmas, miles de personas en una multitudinaria manifestación que recorrió el centro de Ponferrada y una cadena humana de médicos y usuarios en torno al hospital no sirvieron para sensibilizar a la administración. Mantener las camas abiertas era un despilfarro, insistió, una y otra vez el consejero de Sanidad. Y las estadísticas parecen darle la razón, porque este verano siempre ha habido camas libres en el Hospital del Bierzo.

Ahora sabemos que el argumento y las estadísticas que lo sostienen cojea. En demasiadas ocasiones las estadísticas, como las encuentas, las auditorias y las comisiones de investigacion parlamentarias, sólo cuentan la verdad a medias de la parte que las ha encargado.

Las estadísticas oficiales nos dicen que el Hospital del Bierzo ha ahorrado este verano doscientos mil euros con el cierre de camas. Pero al mismo tiempo, la administración autonómica se va a gastar doscientos cincuenta mil euros en un concierto con la sanidad privada.Y esa es la media verdad que no cuentan las estadísticas. Salimos perdiendo cincuenta mil euros.

La verdad completa, la que esconden detrás de la excusa del despilfarro, es que están cambiando el modelo. Están privatizando la sanidad para beneficiar a determinados empresarios. Y nos están haciendo la cama para ocultarnos que no ahorramos dinero con el cambio.