Evitar el pánico en el centro de salud

Un hombre armado con un hacha y una hoz entró ayer por la mañana hasta el vestíbulo del centro de salud de Trobajo del Camino en busca de su mujer, que había acudido con sus hijos al pediatra. El presunto agresor iba visiblemente ebrio y sembró el pánico en las instalaciones durante unos minutos, sobre todo entre los menores que se encontraban en la sala. Los agentes policiales reaccionaron con rapidez y acudieron al centro en cuanto recibieron el aviso, pero fueron minutos en los que pudo ocurrir de todo.

No hay que acudir muy lejos a la hemeroteca para recordar el dramático caso de Violeta, la psicóloga que falleció tras ser apuñalada por una paciente leonesa en el centro de San Juan de Dios de Palencia.

Se da la circunstancia de que hace escasos meses, los centros de salud de León se han quedado sin seguridad y los agentes han sido sustituidos por cámaras de vigilancia, pero sólo en determinadas instalaciones. Carecería de importancia en un mundo irreal, pero los datos oficiales extraídos del Observatorio Regional contra las Agresiones del Personal de Sacyl desvelan que en los centros adscritos a la Gerencia Regional de Salud se producen cada año entre 350 y 400 agresiones, en las que resultaron agredidas 432 personas. Es más de un caso por día.

La rápida intervención de las policías de León y San Andrés evitó ayer una tragedia mayor. Por qué no replantearse ahora las exigencias de los sanitarios para retomar la seguridad en los centros.