EDITORIAL: El conflicto de Picos se enreda
La decisión sobre si será posible la actividad genética en Picos de Europa se ha visto inmersa en un pulso entre el Gobierno y los colectivos conservacionistas que únicamente está sirviendo para elevar la tensión. Las singularidades del parque nacional leonés —en el que hay pueblos con habitantes— no suelen tenerse en cuenta por quienes llevan los intentos de protección a los límites máximos. Pero también es cierto que en el Gobierno se echa en falta una labor pedagógica y práctica para no meter en el mismo saco todas las situaciones existentes en los parques. La caza en Picos es hoy una actividad clave en la zona y es lógico que se reclamen indemnizaciones por su cese.