CORNADA DE LOBO
Los listísimos
T enemos una universidad infectada gravemente de endogamias, han dicho los que más saben de estos sitios (endogamia: apareamiento entre los de un mismo grupo, clan, familia)... campa el compadreo y los favores mutuos, el tú me votas, yo te asciendo, tú me frotas, yo te enchufo... y no sabemos, diría Quevedo, si este mal que aspira a eterno es de España mal gobierno o es divina permisión.
Un informe de Educación confirma que en nuestros santuarios del saber el 72% del personal docente se ha formado y titulado en la misma universidad que les contrata... dicho en román vulgar: chupársela al jefe de departamento deja expedito el camino a la plaza (en propiedad), de modo que el peloteo, la docilidad, la lealtad, la mudez y el amiguismo son sus avales.
Así de claro... no llamarse a engaño... ¿acaso está libre de corrupción el ámbito universitario que, por su saber y función, está especialmente obligado a la altura de miras?... uy, quizá más, pues aunque sean más sutiles y menos escandalosos sus mondongos, si la gente listísima se pone a hacer trampas, las puede bordar mejor que nadie.
Y ojo, que las universidades también son autónomas... ¿piensa alguien que en los claustros catalanes o vascos tienen igual trato que los oriundos aquellos que acuden de fuera?... ¿cree alguien que en la de León no parten con preferencia los propios, las criaturas del departamento, los meritorios del clan?... ¿qué porcentaje de este claustro cazurro suponen los licenciados o doctorados aquí?... ¿y cuántos dobletes y tripletes familiares se cuentan incluyendo al personal no decente?...
Dicen que esta endogamia reduce el nivel de competitividad, alienta la indolencia investigadora o docente y encanalla las relaciones internas... y que todo esto explica el penoso nivel de nuestras universidades, de las que no figura ni una sola entre las doscientas mejores del mundo. En Alemania se prohibe trabajar en una universidad a quienes se hayan licenciado en ella, al menos hasta no haber purgado unos años laborando y aprendiendo en otros centros... pero nuestra ley de autonomía universitaria trajo esto: cosa nostra, camarilla y leña al mono... sabio.