EDITORIAL: La torpeza política frena la plaza del Grano
El proyecto para subsanar las deficiencias que presenta la plaza del Grano aparecía como una de las medidas estrella del actual equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento. Era una obra que, no exenta de polémica, se planteaba objetivos defendibles para corregir los parches de cemento, la reparación de las ‘calvas’ que presenta el empedrado o la ampliación de las aceras que dan servicio a las viviendas.
Pero los años han pasado y la torpeza en la gestión política del asunto ha imposibilitado que se realicen esas mejoras. La búsqueda de atajos ha terminado saliendo cara en materia de tiempos porque tras consumirse buena parte del mandato la plaza del Grano sigue presentando las mismas deficiencias y debe reiniciarse el procedimiento para adjudicar las obras de reparación.
Ahora deberán incluirse en la licitación del proyecto los costes generados por la realización de unas catas arqueológicas que impone Patrimonio antes de actuar en este recinto histórico. Una situación que evidencia la falta de rigor en el procedimiento desarrollado por una Concejalía de Urbanismo que en todo este asunto ha sufrido un auténtico calvario de cambios para adaptarse a unos acontecimientos que nunca se supieron prever convenientemente.
La plaza sigue exhibiendo huecos sin piedras, parches de cemento y carencias para la movilidad. Los vecinos y los visitantes deberán esperar, al menos, unos cuantos meses para que la zona del Grano se recupere.
