EDITORIAL: Oportunismo argumental del Ayuntamiento sobre la ronda
El equipo de gobierno del Ayuntamiento de León defendía ayer, a través de un escueto comunicado, su apoyo al proyecto de soterramiento de los cruces de la Ronda Este en La Granja y en los Hospitales. Lo hacía como respuesta a una dura acusación del portavoz socialista y candidato a la Alcaldía en el sentido de que el gobierno municipal está «más preocupado por sus expectativas electorales», lo cual es aplicable en doble dirección, que por realizar una buena gestión.
El soterramiento de la ronda en esos dos puntos, siguiendo el modelo del proyecto ya ejecutado que acabó con el conflicto vecinal histórico y con el punto mortal del cruce de Villaobispo, se planteó por primera vez en 2003, pero realmente no fue impulsado hasta 2007, cuando se encargó la redacción de los proyectos, terminados un año después. En mayo de 2010 el Ministerio de Fomento aprobó esos planes, cuya ejecución debería concretarse antes de finales de 2013. Tras cuatro años sin consignaciones presupuestarias y sin avances, en junio de 2014 el propio Ministerio de Fomento sometía a exposición pública el proyecto de eliminación de los dos cruces, pero ya no con la solución del soterramiento, sino de una gran rotonda en superficie similar a la glorieta de Carrefour que reduciría los costes de nueve a dos millones de euros. Nada que ver con la idea original, una solución muchísimo más eficaz y segura, como bien ha podido comprobarse. Es curioso que, a tres meses de las elecciones, esa solución más sencilla, de la que el gobierno municipal se convirtió en valedor, sea interpretada ahora como «transitoria» y como «alternativa a medio plazo». El recurrente y ocasional argumento no sólo es irresponsable en su planteamiento, porque añade costes a los costes, sino oportunista y poco ocurrente. Un burdo intento de engañar a los ciudadanos a menos de cien días de las elecciones.