Diario de León
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Kiko Rivera pinchará música en León. Será en junio, en las fiestas del barrio de La Palomera. Sin ánimos de desdeñar, otras son mis milongas. Por ejemplo, aquella de Cafrune que decía «soy el dueño de todo/ pero nunca tengo de nada/ el día que yo me canse/ van a arder las llamaradas». También me gusta el gregoriano. Ah, la juventud. Herrera acaba de pedir que el PP haga las listas pensando también en el voto joven. Lástima que Justin Bieber sea canadiense. Pero siempre habrá un mozo de aquí al que se le pueda sacar cierto aire al cantante, aunque sea con photoshop. Escribí Justin como podía haber escrito Shakira, uno para la concejalía de Tatuajes y la otra para la de Danzas del Vientre. La petición del presidente de la Junta me parece atinada, aunque haya jóvenes y jóvenes. A Kiko Rivera no vamos a negarle el tirón mediático entre su generación, pero dado su perfil sería difícil designarle luego un área; aunque el zagal sea una caja registradora andante, en la de la Hacienda no le veo. Y si los organizadores de las fiestas me permiten una recomendación como anfitriones, me da que no es mucho de ir a museos ni de que le den conferencias sobre la cuna del parlamentarismo, mejor le sueltan un rato por el Húmedo. Si el hijo de la Pantoja no padeciese de gota le podrían obsequiar la nueva edición de El entierro de Genarín, aunque me da que entre sus vicios no figura la lectura. No se pueden tener todos.

Nada hay más relativo que la edad. En la nueva edición del concurso Masterchef, una berciana de 69 años despide energía casera. Lleva muchos años viviendo por el sur, pero la sombra del botillo es alargada. Y da impronta vital.

Son tiempos para la política y todas las generaciones tienen mucho que aportar. Los posicionamientos moderados también han de ser capaces de atraer juventud, pero no podrán hacerlo sin incluir a jóvenes en las listas o a quienes no siéndolo en un sentido biológico son capaces de interesarlos. Eso es lo que creo que ha querido decir Herrera. Los grandes valores universales no tienen fecha de caducidad; los que son sólo generacionales, sí. Porque todo currículo tiene dos partes, lo que has hecho y lo que aún te queda por hacer. ¿Será por milongas?

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