EDITORIAL: Diálogo para evitar la huelga de la basura

Los sindicatos y la UTE que gestiona el CTR de San Román de la Vega y las plantas de tratamiento están obligados a no escatimar ningún esfuerzo para intentar evitar la huelga anunciada para dentro de unos días. Detrás hay un conflicto laboral y por lo tanto existe un evidente margen para negociar y alcanzar un acuerdo que evite lo que en un servicio básico debe ser prioritario: atender a las necesidades de la ciudadanía.

Solventar el conflicto es aún factible a pesar del fracaso en los contactos de negociación que se han mantenido hasta ahora. Aún hay tiempo y por lo tanto deben apurarse todas las fórmulas para conseguir una solución satisfactoria para las partes, y en la que incluso pueden y deben implicarse las instituciones porque lo fundamental es evitar que el servicio de traslado y tratamiento se suspenda, porque sus efectos acabarán trasladándose a la ciudadanía, como ya ocurrió en la huelga de hace cinco años.

En un conflicto como éste nadie debe dar un paso atrás prematuramente. Hasta el último día hay opciones para buscar el acuerdo desde posturas constructivas. Una negociación útil se basa en el planteamiento de alternativas que puedan ser constructivas y ese debería ser el camino empleado por las dos partes.

El daño que puede generarse con una huelga como la que se está planteando sería muy importante. La imagen de León y en general de la provincia se deteriorará sin duda en un momento en el que el turismo ya empieza a fluir con la llegada del buen tiempo. Además, esta huelga llega en una época del año muy distinta a la de 2010, cuando las bajas temperaturas sirvieron de algún modo para frenar el deterioro de la basura que acabó acumulándose en las calles. Ahora, en pleno mes de mayo, los efectos de salubridad pueden ser graves y por ello se hace más imprescindible ese esfuerzo en favor de un acuerdo necesario.