EDITORIAL. San Glorio: un sonoro clamor en defensa de oportunidades
La anulación en su momento por parte del Tribunal Constitucional de la ley que abría la puerta al desarrollo de la estación de esquí, el gran proyecto pensado para impulsar su economía, dejó a la Montaña Oriental sumida en la incertidumbre y la inevitable decepción de quien había puesto en esa idea la ilusión por el futuro de una comarca de una enorme belleza natural y limitados recursos. La orografía y la situación geográfica juegan en la misma medida a favor y en contra de sus posibilidades en ese sentido.
Independientemente de si la larga y tortuosa tramitación legal recorrida fue o no la correcta, es una decisión judicial que debe ser aceptada al margen de la duda sobre qué efectos podría haber tenido ese macrocentro de ocio sobre un entorno natural realmente privilegiado. Pero lo que resulta evidente es que la lucha de los grupos ecologistas ganó la batalla en relación con este proyecto invernal que acabó sucumbiendo como consecuencia de los graves errores que lo llevaron a un callejón sin salida. Sin salida legal, al menos de momento.
Los grupos conservacionistas impulsores de ese bloqueo alzan ahora la voz, con más fuerza si cabe, en defensa de su propuesta de desarrollo sostenible a través del ecoturismo y hoy se harán visibles, con el apoyo de los alcaldes de la zona, en una marcha popular sobre ese escenario hartos de limitaciones para el desarrollo de actividades que no sólo no se prohíben en otros parecidos, sino que se impulsan desde las administraciones. Pero más allá del gesto puntual es necesario no sólo definir un proyecto global, sino también desarrollar el marco legal y un modelo de financiación. La naturaleza es prácticamente el único patrimonio de quienes la mantienen viva y sólo un desarrollo equilibrado y justo evitará la despoblación y la muerte de una comarca extraordinariamente necesitada de oportunidades.