Diario de León
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León

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Sin imposiciones

A storga es una ciudad que a los cepedanos nos cae cercana y lo mismo que casi toda nuestra actividad comercial la realizamos en ella, también nos afectan y nos preocupan sus asuntos diarios, y la política no iba a ser menos. Ni entro ni salgo en a quién han de votar los astorganos, ¡ellos sabrán! y seguro que lo sabrán, pero no es de justicia contemplar los tejemanejes subterraneos de quienes se resisten a perder la preponderancia que tuvieron antaño. La alcaldesa Vitorina Alonso ha tenido la valentía de no admitir sujerencias ni imposiciones, lo que le ha acarreado la intolerancia de muchos de sus ¿compañeros? No sé si es buena alcaldesa, pero sí ha demostrado tener personalidad.

Astorga languidece

A l arriero no le preguntes cómo le va, sólo mira si vuelve». Hace muchos años, mi madre Pura ‘la Maragata’, que con orgullo mantiene el gentilicio a pesar de que ha pasado mucho tiempo desde que sus progenitores tuvieron que buscar otras tierras próximas donde ganarse la vida —sí, a principios del siglo pasado también los maragatos se veían obligados a emigrar— me contó este sencillo refrán. El dicho es todo un paradigma sobre el grado de credibilidad que puedan tener las encuestas, sobre todo si la pregunta se hace por estas tierras. Y más si apuntan a los mismos. Y digo los mismos porque en realidad lo son, aunque hayan cambiado la indumentaria. Utilizando un símil futbolístico son los mismos equipos, con los mismos intereses, e idéntica estrategia de juego pero que han cambiado la camiseta y al delantero centro. Entonces es que los astorganos no han encontrado a nadie capaz de cautivarles y se encuentran muy cómodos en este peloteo «tuya-mía» de una Astorga que languidece.

Dinero del propio bolsillo

H ace unos días leí que David Fernández opta a su cuarta reelección como alcalde y que su candidatura incluye a José Antonio Cabello. Para mí hubiese sido una noticia más si no fuese porque, a día de hoy, le pongo cara a esos dos nombres. El próximo verano hará dos años que un miembro de mi familia residente en La Virgen del Camino, recibió en su domicilio la notificación de que le habían abierto un expediente sancionador. El instructor de dicho expediente era Cabello y quien firmó la sanción fue David Fernández. Nunca conseguimos saber cuáles eran los hechos por los que se le sancionaba. Es más, el alcalde me dijo a mí personalmente que si queríamos que nos diesen la razón, acudiéramos a los tribunales. En resumen, se había decidido sancionar a esta persona sin atender a razón alguna. El mismo día de la vista en el juzgado presentaron un escrito de allanamiento. En consecuencia, tuvieron que devolver los 200 euros de sanción que habían impuesto más el interés legal del dinero (el 40%) y pagar los honorarios de la letrada de la persona sancionada y, supongo que los del abogado del Ayuntamiento. Lástima que ese dinero no saliera del bolsillo de David Fernández y de José Antonio Cabello. Supongo que es mucho más fácil jugar de farol cuando el dinero que se arriesga es el de los contribuyentes.

El candidato socialista

de Quintana del Castillo

E l PSOE ha impuesto un candidato en detrimento del que fue elegido democráticamente por la agrupación de Ferreras de Cepeda. Es el actual alcalde, que junto a algunos de su séquito, está imputado en varios frentes. Quien dice mentiras es mentiroso, ¿no? Con todos mis respetos, Pedro Sánchez lo es. En varias ocasiones y públicamente ha manifestado que mientras él sea secretario general no permitirá en su partido a imputados en sus listas (que nos lo explique y en concreto este caso).

¿Más de lo mismo?

E stamos en campaña y la mayoría se hacen llamar salvadores «progres» o salvadores de la «extrema izquierda», pero ¿cuáles son esos milagros con los que nos van a sacar de estas situación en la que estamos inmersos? Unos, culpan al partido acomodado en el poder de tener las riberas de los río sucias (en realidad, la culpa va dirigida a la empresa adjudicataria de jardines…). Señores políticos denunciantes, ¿es que solamente nos acordamos de los ríos y sus riberas a un mes visto de las elecciones? Sepan ustedes que, sociedades de pescadores limpian desinteresadamente las riberas de los ríos. Permítanme ofrecerles un consejo de pescador que sabe de lo que está hablando: Pónganse ropa de faena apropiada y únanse a limpiar nuestros ríos junto a los diversos colectivos antes mencionados. También ha sido expuesto por otro de nuestros candidatables políticos la eliminación de puestos de trabajo que ellos creen «prescindibles». Dada mi ingenuidad connatural me pregunto a mí mismo qué puestos de trabajo estiman estos tipos prescindibles. ¿Serán, acaso, los suyos? ¿Esta clase política va a solucionar nuestros problemas?

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