EDITORIAL: Un error ya enmendado

La rebaja parcial del llamado céntimo sanitario, un gravamen complementario aplicado a los combustibles por algunas comunidades autónomas, ha supuesto un incremento de los ventas en León desde su aplicación el 1 de enero del 5%, en buena medida por la generosa contribución de los transportistas y viajeros que vienen a o van a Asturias y Galicia, donde repostar resulta ahora más caro. Esta cifra y la promesa del reelegido presidente de la Junta de eliminarlo en su totalidad ponen en evidencia el error de su aplicación. Porque al margen de la enorme complejidad del proceso de devolución a los transportistas se ha demostrado ineficaz en el objetivo por el que se impuso. No se recauda más y la realidad es que se consume menos donde se aplica porque se reposta en otro sitio.