EDITORIAL: Un proyecto industrial que es imprescindible en La Bañeza
Ilunion debe resurgir cuanto antes de las cenizas. La factoría de reciclaje integrada dentro de las iniciativas de la Fundación Once es uno de esos proyectos imprescindibles por la labor social que desarrollan. La planta de tratamiento de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos lleva en funcionamiento desde 2009 y da empleo a más de medio centenar de trabajadores. El 90% de los empleados de Ilunion —sociedad que fue inaugurada por el presidente autonómico Juan Vicente Herrera— son personas con discapacidad. La inversión realizada fue muy notable e incluso para la puesta en marcha de esta factoría se destinaron partidas económicas de dinero público a través de la Junta.
Y ahora es cuando no se puede debilitar una obra tan relevante. Desde hoy mismo los promotores de Ilunion deben ponerse manos a la obra con las instituciones implicadas para que la factoría recupere cuanto antes una situación lo más normalizada posible. Y se hace necesaria una investigación para estudiar cuáles son las causas de este siniestro porque no debe olvidarse que es ya el segundo que sufren sus instalaciones en sus media docena de años de historia.
Apenas doce meses después de su puesta en marcha, en la planta bañezana de Ilunion se registró también otro fuego —aquel de menores proporciones que éste— y aunque en ninguno de los casos se han producido daños personales, se hace imprescindible que en un futuro se evite en lo posible nuevos problemas como el ocurrido este domingo.
La investigación apunta que el material acumulado es altamente combustible y que se generan altas temperaturas de forma fortuita. Pero entonces quizás sea el momento de plantearse si las fórmulas elegidas para el almacenamiento son las más adecuadas para prevenir accidentes.
