EDITORIAL: Temperaturas que tienen que ser representativas
La Agencia Estatal de Meteorología admite que las temperaturas que facilita de León a través de sus medios automatizados no son representativas. Confirma lo que venían denunciando distintos aficionados desde que la ampliación del aeropuerto propicio un traslado del medidor desde el que se difunden los datos sobre la zona de León. Las temperaturas, especialmente las mínimas, no se ajustan a la realidad porque son tomadas en una zona con una especial singularidad que genera un descenso de grados que no es real al de la ciudad. El paso dado por Aemet es importante porque da la razón a quienes critican la actual situación y reclaman una modificación de los sistemas.
El propio Ayuntamiento de León ha optado por intervenir en esta polémica que genera un daño evidente a la ciudad al invitar de algún modo a que no se visite al ofrecer unas temperaturas tan extremas que no son un reflejo de la realidad.
Ahora la agencia gubernamental asegura que está dispuesta a buscar una solución, pero la relega a que existan disponibilidades presupuestarias. Y parece que desde León debe exigirse de manera inmediata al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) que busque fórmulas para financiar una solución que se hace imprescindible una vez que se ha comprobado y admitido un error que es dañino.
Seis grados de diferencia son muchos para unas mediciones acordes con el siglo XXI. Hoy es habitual que se comprueben las temperaturas a través de Internet o con aplitaciones de teléfonos móviles y el dato que se ofrece al ciudadano tiene que ser lo más «representativo» posible. La fama de que en León hace frío no debe agravarse gratuitamente.