EDITORIAL: Incoherencia sobre los vertidos al río en La Pola
La actuación de las diferentes administraciones genera en ocasiones sinsentidos que a la ciudadanía le cuesta asumir. Es verdad que hay problemas o asuntos que en función de cómo se afronten pueden generar juicios distintos. Pero lo ocurrido con los vertidos al río Bernesga en La Pola de Gordón tiene una difícil justificación. A la existencia de unos residuos que presuntamente proceden del matadero parece inaceptable que se responda con posturas tan opuestas. Alguien debe aclarar cómo es posible que mientras el Servicio Territorial de Sanidad aprecia un cumplimiento escrupuloso de la normativa, se detecten irregularidades por parte de Somacyl (Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León) y la Confederación Hidrográfica del Duero abra un expediente contra el Ayuntamiento, como titular de la depuradora.
Lo ocurrido reclama que alguien tome cartas en el asunto y explique a los ciudadanos cuál es la situación real. Y lo que es más importante que establece un criterio frente a un hecho objetivo.