EN BLANCO
25-Redención
Afortunadamente, hemos salido indemnes y en perfecto estado de revista de la fanfarria navideña auspiciada por la industria del polvorón y el cotillón. Y ahora que las carnes comienzan a volver a su sitio nos enredamos en otra celebración, pero de cariz espiritual. Tal día como hoy, hace 25 años, se erigía canónicamente en la iglesia parroquial de San Martín la que se bautizó con el título de cofradía de Nuestro Señor Jesús de la Redención. Un grupo de jóvenes entusiastas y entregados a la memoria sagrada arropada por un embrujo de siglos, y dirigidos con mano maestra por un hombre con tanta sapiencia paponil como el ya difunto Oscar Trobajo Gallego, comenzaron a dar forma a una nueva cofradía que aunase aquellos valores perdidos que sintetizan a la perfección el espíritu de la Semana Santa leonesa. Por ello, el raseo, el silencio y la arqueta fueron, son y serán las señas de identidad de la Redención, una cofradía de barrio en toda la extensión de la palabra que desgrana por su zona de confort del Barrio Húmedo una sentida catequesis urbana que forma parte principal de la cita anual semanasantera.
Ayer llevaron por San Martín al Cristo de la Redención, en su traslado a la parroquia para celebrar la solemne Eucaristía que conmemoraba dicho aniversario, y al finalizar el acto fue devuelto a su lugar de costumbre, el convento de las Benedictinas, para que allí, desde su ventana, vigile la romántica plaza del Grano y guíe a los peregrinos hacia Santiago. En realidad, la 25 onomástica comenzó anticipadamente el pasado 27 de diciembre, cuando siguiendo los mandatos del Concilio Vaticano y atendiendo a los deseos de toda la cofradía, Nuestro Padre Jesús de la Misericordia fue entronizado en su capilla de la iglesia de San Marcos, donde recibirá durante todo el año el culto de los feligreses y acompañará a Nuestra Madre de la Divina Gracia, que también tiene su capilla en dicho templo. A lo largo del 2016 están programados otros actos por parte de la Redención, una cofradía nacida por y para la Semana Santa. Felicidades, amigos, y a cumplir muchos más.