Frustración y gresca por la falta de nieve

La escasez de nieve que mantiene inactivas las estaciones de esquí de la Cordillera Cantábrica genera pesimismo sobre las instituciones que las administran y sobre todo enfado y frustración entre los hosteleros de la zona, que en cualquier caso, dan ya por perdida la mayor parte de la campaña. La última gresca por este motivo tuvo su origen en Fuentes de Invierno, la ladera asturiana que da la espalda a San Isidro. Y el motivo fue la propuesta del presidente de los empresarios turísticos Aller Experiencias, Armando Valdés , de instalar un sistema de innivación portátil que, en la visión del Principado, está «más pensado para eventos que necesitan poca superficie a cubrir y en condiciones de temperatura singulares que para pistas de esquí alpino», y cuyo alquiler cuesta además unos 30.000 euros por quince días. El leonés José Ramón Tuero , que es director general de Deportes, zanjaba la cuestión con el presidente de los hosteleros de Aller: «Que deje de marear creando expectativas falsas, caras y nada operativas para Fuentes».