Voto moldeado en las diputaciones que exhibe la peor cara de la política

El doble debate sobre el futuro de las diputaciones sirvió para poner negro sobre blanco a la hora de aclarar las verdaderas intenciones de cada uno. El pacto del PSOE con Ciudadanos a nivel nacional incluye entre sus cinco medidas básicas la supresión de estas instituciones. El partido de Albert Rivera no engaña a nadie y durante la campaña electoral hizo bandera abiertamente de ese deseo que tiene como fórmula para adelgazar la administraciones española. Pero el problema surge en las filas socialistas, porque el pacto ideado por Pedro Sánchez y sus colaboradores más próximos complica y mucho la situación de sus cargos provinciales, que son conocedores de la importancia que tienen las diputaciones.

Por ello es de alabar la valentía exhibida en lugares como León, Soria, Extremadura o Andalucía donde los cargos locales apoyan iniciativas para defender la institución que es la garante de la vida en el mundo rural.

Pero si eso ocurría en la Diputación de León ayer por la mañana, las cosas cambiaron radicalmente y en el Pleno del Senado el Grupo Socialista votó directamente en contra de la iniciativa para defender la superviencia de las instituciones. Una vez más se entrecruzan intereses y se da la sensación de que se opta por votos moldeados según la situación y las estrategias de cada lugar, porque el representante del PSOE leonés en la Cámara Alta desdijo de plano la postura mostrada por la mañana por sus compañeros en el Palacio de los Guzmanes.