Diario de León
Publicado por
HOJAS DE CHOPO ALFONSO GARCÍA
León

Creado:

Actualizado:

P ermítanme llevar de nuevo estas hojas temblorosas a Puerto Rico. Al reciente congreso de la Lengua, en el que, entre tantas buenas noticias, los directores y presidentes de la Asociación de Academias de la Lengua Española (Asale) acordaron por unanimidad la incorporación a su estructura organizativa de la Academia Ecuatoguineana, solicitada en noviembre de 2015. Con este ingreso son ya veintitrés las academias que forman parte de la Asale, creada en México en 1951.

Es una magnífica noticia, digo, porque significa un paso más en el fortalecimiento de un idioma diverso pero unido que adquiere cada día más cuerpo presencial en los más diversos puntos del mundo. Las conquistas del idioma son un vehículo de entendimiento que, a la larga, pueden y deben fructificar en otras áreas y actividades. El español, que tiene las mismas raíces, con diversos rostros, debe responder a los supuestos de la hermandad que, más allá de lo puramente lingüístico, cohesiona los pueblos.

Guinea Ecuatorial tiene herencia hispana, de la que sus habitantes se sienten orgullosos como cultura añadida pero real. Y, a pesar de la posición geográfica complicada —es el único país africano en que se habla— y las inevitables amenazas lingüísticas, por qué negarlo —el inglés de las petroleras, por ejemplo—, el español, que comparte oficialidad con el francés, es hablado por el noventa por ciento de la población y es el idioma de la comunicación internacional y la enseñanza. Una cosa es la lengua, otra, distinta, la política. España, cuyo comportamiento en este último sentido no ha sido ejemplar en muchas ocasiones con Guinea —ningún pueblo es responsable definitivo de sus dirigentes—, convirtió allí en atractiva la lengua común respetando, además, las diferentes lenguas vernáculas —la mayoritaria es el fang—, que, desgraciadamente, al carecer básicamente de tradición escrita, se pueden debilitar. Si un idioma se descuida, corre riesgos, especialmente en el contexto de las luchas hegemónicas y de poder en que vivimos.

Comprenderá el porqué de la importancia de la noticia. La cohesión internacional de nuestra lengua la fortalece. Y como toda debilidad tiene su correspondiente fortaleza, Guinea puede convertirse en centro difusor del español en África, dado el interés que está suscitando, por ejemplo, en Camerún, Gabón, Costa de Marfil, Togo o Gana. Sus atractivos son buenos aliados. La resistencia se convierte en esperanza.

tracking