Nuevas mentiras del PSOE en San Andrés

S eñor Santiago Blanco. Una de las cosas que más me llamó la atención cuando era niño, fue el efecto del imán. Me sorprendía cómo los polos opuestos se atraían con fuerza y cómo por el contrario los polos iguales se repelían de la misma manera. Hoy usted me ha vuelto a recordar aquellos momentos, y sabe ¿por qué?, porque lo manifestado por usted en la contestación a mi Tribuna publicada hace casi dos meses (tiempo tardó usted en pergeñar una contestación y así le salió), se repele frontalmente con el polo de la verdad, así que ya sabe con qué polo se atrae.

Mire señor Blanco, de corazón se lo digo, analizando todas y cada una de las cuestiones que usted trata, solo hay una realidad, y es que ha puesto bien mi nombre y el puesto que desempeño actualmente en el Ayuntamiento, en lo demás, siento contradecirle pero son todo interpretaciones, tergiversaciones y elucubraciones suyas.

Me dice inicialmente que soy portavoz del Grupo Popular a tiempo parcial, dadas las innumerables ausencias. ¿Sabe porqué se han producido? Sencillamente porque mi profesión es la de funcionario y no la de político. Yo me debo a mi trabajo y cumplo con mis obligaciones como concejal. Como verá mi afán no es cobrar del Ayuntamiento, porque las asistencias a comisiones o plenos, se cobran y yo voy algunas tardes al Ayuntamiento a ejercer mi función, como usted ha podido comprobar y muchos funcionarios atestiguar, sin cobrar. Es decir no he ido a algunas comisiones y plenos, donde se cobra, y sí voy a reuniones y compromisos dónde no se cobra. Todo lo contrario que hacían ustedes en la oposición. Nunca faltaban a una comisión o pleno, y no se les volvía a ver por el Ayuntamiento hasta la próxima comisión o pleno. ¿A que es verdad seño Blanco? ¿O ya no se quiere acordar?

Continúa diciendo que me jacto de decir que incumplí la ley y que lo hago con descaro por ignorancia o temeridad. Sabe usted que ni por una razón, ni por la otra. Fue por valentía, porque para mí ayuntamiento era decisivo y vital en ese momento. Es muy fácil decir y no hacer. Yo al menos hice.

Señor Blanco, ahora sí que está usted pillado. Pongo a todos los lectores de testigos para que lean mi Tribuna del día 20 de febrero y a continuación analicen la valoración que usted hace de lo que yo dije. Verán todos los lectores quién es usted, como de manera consciente tergiversa la realidad, y si lo hace en eso, probablemente lo haga en todo. Por cierto está usted llamando ignorante o temerario al Ministerio de Hacienda, que fue quien les dijo que el presupuesto se consideraba prorrogado y que solo faltaba el acto administrativo de la prórroga. Pero es que además estarán perplejos todos los compañeros de corporación. Fíjese señor Blanco, por no tomar la decisión que yo tomé en su momento, ustedes han puesto en jaque al Ayuntamiento y han llevado un asunto que no es de pleno, al Pleno, conociendo y manifestando usted públicamente en el propio pleno, que el acuerdo es ilegal y nulo de pleno derecho.

A pesar de ello, no tienen ningún reparo en implicar a todos los corporativos únicamente por cobardía por no afrontar lo que el cargo que ocupa la alcaldesa le obliga. Y yo me pregunto, si es ilegal, ¿por qué lo llevan al Pleno? ¿Quién es ahí el temerario? ¿Pero qué concepto tiene usted de la ilegalidad? ¿O hablamos de ilegalidad selectiva? ¿Depende quién lo haga es o no es ilegal? ¿Qué le merecen para usted los grupos de la oposición?

Por otra parte, señor Blanco, me maravilla la capacidad que tiene para negar abiertamente y sin rubor, conversaciones que hemos mantenido usted y yo. ¿Cómo me puede decir que no teníamos proyecto de presupuesto, si usted y yo hemos hablado de que el proyecto que nosotros elaboramos era la base del suyo? Pregunte en contabilidad y que se lo enseñen, y por cierto, no ponga en mi boca lo que no he dicho. Yo nunca he manifestado que lo habíamos enviado al ministerio. Públicamente y en varias ocasiones he dicho que no lo pudimos enviar por mor de las elecciones, pero usted sabe con certeza que estaba hecho. Es más, este medio de comunicación en el que nos encontramos, lo conoce también. ¿Que habrán pensado?

En cuanto a la municipalización de la limpieza sabe usted que ha sido la salvación del municipio, y sabe usted que los informes jurídicos que confirman la forma en que lo hicimos, existen. Me llama la atención lo del ‘engaño vil’ al personal de limpieza. ¡Hombre!, no se con quién habrá hablado, probablemente fuera su hermana que casual y curiosamente era una de las que trabajaban en limpieza, porque el resto no se sienten así. Por el contrario, pregúnteles ahora lo contentos que están con usted y resto de equipo de gobierno, al igual que el resto de los funcionarios y técnicos. Pregunte, pregunte.

Y en cuanto a los premios que les concedieron, fíjese que me habla de un premio concedido allá por el año 2007, y referido al añorado Parque de la Era, del que tan orgullosos estaban, que en el año 2009 talaron 150 árboles que habían plantado los vecinos, y que hoy todavía recuerdan con nostalgia. O no se creen los premios o no les gustan.

Y ejercitando un poco la memoria, fíjese que se cargaron el querido Parque de la Era, con una obra del famoso y defendido por ustedes Plan E, por el que recibieron la subvención, y aun así, estando el PP en el equipo de gobierno, tuvimos que hacer frente al pago por una sentencia millonaria, de esas que tanto le gustan a usted en la actualidad, a través del Plan de Pago a Proveedores y con cuantiosos intereses. ¿A qué una ligera idea de esto tiene? Si quiere se lo recuerdo con más detalle y entramos en profundidad en ello.

Lo de la deuda ya es para nota, porque es que se ha metido usted en un jardín que conocen todos los ciudadanos de San Andrés. Pero fíjese usted que hasta en su manifestación patina. Si usted dice que la deuda financiera es de 50 millones de euros (pura gestión del equipo de gobierno socialista), y nuestra gestión dejó 20 millones de euros, el total suman 70. Cuando nosotros entramos en el Ayuntamiento como equipo de gobierno, en junio de 2011 la deuda alcanzaba los 78 millones de euros.

Aun no siendo cierto lo que dice usted, si lo fuera, por sus argumentos quedaría demostrado que hemos bajado deuda, y ello sin subir impuestos, tasas o precios públicos y con la prestación digna de los servicios. Y por el contrario, desde que ustedes ocupan la Alcaldía, ¿qué nos hemos encontrado? Pues únicamente intentos fallidos de subidas de impuestos gracias al voto en contra de la oposición, modificaciones de ordenanzas para recaudar más en perjuicio de los ciudadanos y no se engañe, servicios parados como la piscina o el centro de ocio o de muy bajo funcionamiento, como la limpieza y los jardines.

Por todo ello, señor Blanco, decirle que mi contestación es tan fácil que he tardado dos minutos en hacerla. Usted ha tardado casi dos meses. ¿Sabe por qué? Como dice el rico refranero español «quien quiere engañar, miente, y quien miente engaña». He dicho.