El Musac y el arca

E l sábado se inauguró la colección All yesterday’s parties, música y vinilos de Andy Warhol en el Musac de Castilla y León, ubicado en nuestra ciudad. Me dejé llevar por el título y acerté en la elección. Visito el Musac con menos frecuencia de la que me gustaría porque, aunque no tengo un criterio formado sobre el arte contemporáneo, tampoco las colecciones exhibidas, salvo contadas excepciones, me han atraído. No obstante toda creación artística tiene que transmitir un mensaje hacia el espectador que luego cada individuo interpretará subjetivamente de acuerdo con su cultura y sensibilidad.

La colección que he visto me ha gustado porque el artista nunca nos deja indiferentes. Como dice el título es una retrospectiva de los años de la música en vinilos, música experimental de los años 50 a 80, contactos con la mayoría de los artistas de la época de la música experimental, rock, soul, jazz y el comienzo de la new wave. Todo ello visto desde la recopilación de los trabajos realizados por el polifacético artista Andy Warhol, natural de Pittsburgh, pero hecho artísticamente en Nueva York. No es solo una exposición de pinturas, música, o de películas sino un diálogo o un puente entre el creador de la obra, el que la da a conocer con una fuerte dosis de provocación y el consumidor.

Andy con sus trabajos consigue que sea más importante la imagen a través de la cual se incita a la compra de un LP que el contenido del mismo, como nos explica el comisario de la exposición F. Javier Panera. Hasta tal punto que la élite de su momento le buscaba para que les hiciera los diseños de portadas de los discos. La personalidad de Andy Warhol llegó a ser tan arrolladora que en algunos casos sus firmas eran más importantes que el contenido musical. Nos transporta a la época del pop-art, el underground neoyorquino, las imágenes repetitivas de Marilyn, Elvis, Mao, productos de consumo,  colores provocativos, vivos, brillantes en contraste con los monocromo, sin olvidar los trabajos en publicidad y cómic: En resumen, arte total.

Hay muchos más que disfrutar en esta colección. Yo animo a descubrir, no importa la edad, esta exposición que ojalá tengas suerte de que te explique el Sr. Panera.

El Musac ha cumplido ya diez años. Durante los cuales, tras unos primeros años de éxito sufrió un descenso progresivo de visitantes, que últimamente se va paliando. El sabio refranero popular dice que ‘El buen paño en el arca se vende’, pero no he visto a ningún empresario con éxito que teniendo un buen producto para vender no le ponga en primera línea a disposición de los clientes.

Este no es el caso de la gestión comercial del Musac de Castilla y León. Si quieren que el público visite este museo de León debe hacérselo saber y, como en los primeros años, realizar campañas de publicidad. Hoteles, restaurantes, bares, monumentos, museos, transportes, etc, esperan que desde el Musac se den a conocer las nuevas colecciones y se seleccione aquellas que, como la que nos ocupa, tengan mayor «gancho» entre los castellanos, leoneses y habitantes de las comunidades autónomas limítrofes. Pronto verán como aumentan las visitas.