EDITORIAL: Feliz regreso de la educación para adultos

Bajo la exigencia de que «la cultura tiene que llegar a todos los rincones de la provincia, también a los pueblos», la Diputación retomará este año el programa de educación para adultos injustificada y desafortunadamente suprimido en 2012 tras un cuarto de siglo de excelente servicio al medio rural. Lo hace tras consultar a los municipios y obtener una más que convincente respuesta no sólo por parte de los ayuntamientos, sino también de los vecinos. Un centenar de municipios y casi dos mil personas —el perfil dominante es mujer de más de 64 años— participarán en la próxima edición de este peculiar programa de formación con preferencias muy determinadas: Internet y telefonía móvil. Si el valor de las administraciones se mide por su capacidad de dar respuesta a este tipo de necesidades e inquietudes ciudadanas, la iniciativa de la institución provincial merece al menos el reconocimiento y la gratitud por hacer lo que nunca debió de dejar de hacer.