Esfuerzo para que nadie pueda evitar pagar los recibos

Los recibos girados por Gersul para financiar el tratamiento de los residuos sólidos urbanos en la provincia de León han estado sumidos en una permanente polémica a la que se pretende poner fin. Los problemas vividos en los primeros años llevaron a la Diputación a buscar una solución de la mano de la iniciativa privada pero el tiempo ha probado que la fórmula no era la adecuada.

Ahora Gersul ha optado por asumir directamente la gestión a través del Servicio Recaudatorio Provincial. El próximo ejercicio se otorgará la tramitación de los recibos del CTR al equipo especializado que ya se ocupa en estos momentos de la mayoría de las tasas e impuestos locales que se cobran en los municipios de menos de 20.000 habitantes. Pero existe una bolsa de recibos pendientes por un importe de 14 millones de euros que es inasumible por parte de este Servicio Recaudatorio, ya que se vería colapsado por el volumen de impagados que se hereda de las distintas etapas por los problemas surgidos.

La Diputación opta por realizar un esfuerzo para que nadie se quede sin abonar lo que adeuda. Es lógico y de justicia que se intente evitar la morosidad. Una empresa especializada se ocupará de buscar a quienes no han contribuido como debían a pagar la gestión adecuada de las basuras.

Pero más allá de esta solución temporal lo importante es que Gersul logre estabilizar y normalizar el cobro de unos recibos que ahora quedan en manos de los trabajadores de la propia Diputación.