cartas al director

c Ulpiano García Pérez escribe en los ‘50 años de la Promoción 1966 Soldados de Aviación’: «¡Cómo han pasado los años! 50 nada menos. Y vienen a mi memoria aquel reconocimiento en Valladolid, la entrada por primera vez a la base, los ‘vuelos’ nocturnos, las guardias, los cambios por el polvorín con 50 centímetros de nieve, los amigos que hice y que todavía conservo, la jura de bandera para rememorarlo, pero sobre todo la licencia al año de entrar. No tengo duda de que a pesar de lo duro que era, se pasaron muy buenos momentos. Por eso ahora que el 21 de octubre, vamos a encontrarnos para volver a jurar bandera y a abrazar a los compañeros. Me embarga la emoción. Un abrazo, compañeros, y nos veremos ese día».

c Las amigas de Bego la despiden: «Algo se muere en el alma cuando un amigo se va...» dice la canción. Y algo se ha muerto dentro de nosotras el pasado 29 de agosto, por lo inesperado, por lo trágico, por lo absurdo... Tantos años luchando como una heroína, en todos los sentidos, y te vas de aquí sin avisarnos, con prisa (¡tus malditas prisas!...). Pudiste hacerlo en múltiples ocasiones debido a tus enfermedades, a tus «historias»... pero aquí seguías, echándole coraje a la vida.

Asumías para ti la frase del calendario: «Aunque la vida no sea la fiesta que esperabas, nunca dejes de bailar». Pero ya no te tendremos contándonos, aconsejándonos, riñéndonos, medicándonos, poniéndonos «de los nervios»... ¡Y es una grandísima

putada!.. Pero, ¿sabes?...Vamos a bailar, a beber, a viajar, a charlar, a comer

(¡esto con moderación!, no te enfades). Y siempre habrá alguna anécdota que contar: «Como decía Bego...», «como hizo Bego...» y seguirás con nosotras, vivirás en nosotras»