EDITORIAL | Culpabilidad política por el caso Yak-42
El dictamen del Consejo de Estado sobre lo ocurrido hace casi 14 años cuando 62 militares fallecieron en un accidente de aviación en Turquía permite establecer una culpabilidad política que siempre echaron en falta los familiares de las víctimas. Se asegura en un informe que el siniestro del Yak-42 podría haberse evitado si se hubieran tenido en cuenta los incidentes que ocurrieron en el transporte de tropas que regresaban desde Afganistán en vuelos anteriores al de la tragedia.
El tiempo transcurrido lleva a la mayoría de las familias a intentar pasar página porque vivir permanentemente en el dolor se haría insoportable. Pero también hay que entender la indignación porque las responsabilidades se limitaron en exceso al descargarlas fuera de las fronteras españolas, en quienes contrataron el vuelo y lo realizaron. Parece razonable que de nuevo se cuestione la situación del entonces ministro de Defensa, Federico Trillo, como embajador en Londres.
