cartas al director
c Mari Carmen Álvarez escribe sobre la situación de San Andrés del Rabanedo: «Sra. alcaldesa, ¿cuántos balones de oxígeno necesitará nuestro municipio por la mala gestión de su equipo de gobierno? ¿Cuántas sentencias judiciales tendrán que pagar los ciudadanos por la mala gestión de su equipo de gobierno? ¿Cuántos años más tendremos que aplazar la deuda y seguir hipotecados durante generaciones por la mala gestión de su equipo de gobierno? Es usted ¿alcaldesa o maga? ¿Cuántos conejos le quedan en la chistera? Hace unos meses su equipo de gobierno pidió seis millones de euros para pagar costas judiciales generadas por ustedes, ¿van a pedir otro crédito y a endeudar aún más el Ayuntamiento para pagar esta nueva condena en costas judiciales? ¿Qué pasará con los presupuestos del 2017, (aprobados por hacienda) al haber un incremento de más de medio millón de euros? La deuda en San Andrés es de más de 2.500 euros por habitante. Los niños nacidos en el municipio ya no vienen con un pan debajo del brazo, vienen con una deuda importante, para sus padres, para ellos y para ¡sus futuros hijos! La gestión de su equipo de gobierno desde luego no es aburrida, pero sí lamentable. Hágase un favor a sí misma y a los ciudadanos: ¡Váyase!»
c María Fernández escribe sobre la falta de alumbrado en el centro de Ponferrada: «Con mucha frecuencia paso por las calles más céntricas y en concreto por la avenida de España. Pensaba que esa sensación de que no hay luz era por los árboles, pero observando las farolas me he dado cuenta que el problema es que tienen tal cantidad de porquería acumulada en sus cristales que se hace imposible que la claridad que emiten las bombillas pueda salir hacia fuera. La falta de alumbrado no se deriva de que las luminarias sean viejas, ni tampoco de que haya pocas farolas... es cuestión de pura roña acumulada durante años y años. Temo que desde que se instalaron hace como unas dos décadas nunca se han limpiado. Pasen y compruébenlo en persona».
c Ramiro escribe sobre la manifestación contra las obras de la plaza del Grano: «Si en la foto que se publica en el Diario de León están todos los leoneses descontentos con lo que se está haciendo en la plaza del Grano creo que podemos dormir tranquilos. Salvo, eso sí, que todos los manifestantes sean las mentes más doctas y preclaras de la ciudad».