La recuperación llega a los hogares
L as informaciones sobre corrupción siguen copando lógicamente la actualidad. Los casos se multiplican y los asuntos económicos están pasando a un segundo plano. Sin embargo, la recuperación económica sigue arrojando datos muy positivos.
Estos días se ha sabido que tanto el gobierno como organismos internacionales y servicios de estudios privados han aumentado sus previsiones de crecimiento de la economía para este año. De hecho, el BBVA eleva la suya hasta el 3 por ciento. Y es bastante posible que se cumplan puesto que se van despejando las incertidumbres de la política internacional. Por ejemplo, el resultado de la primera vuelta de las elecciones en Francia ha sido todo un respiro para la economía europea. Se ha notado en las bolsas, pero también en las primas de riesgo.
La buena marcha de la recuperación económica se está trasladando además en su totalidad al empleo. Y también mejoran los ingresos de las familias.
El INE hacía público este martes que el ingreso medio por persona se situó en 2015 en 10.707 euros, lo que supone un 2,8 por ciento más que en el año anterior y el mayor aumento desde 2009. Mientras, los ingresos medios anuales por hogar fueron de 26.730, es decir, un 2,4 por ciento más que el año anterior y el primer aumento en seis años.
Hay que tener en cuenta, además, que para este año ya hay muchas empresas que han anunciado aumentos salariales por encima de la inflación. Por ejemplo, las grandes empresas de distribución han hablado estos días de la posibilidad de llevar a cabo un aumento de los salarios de hasta el 2,4 por ciento. Cierto que aún hay muchas familias que viven en el umbral de la pobreza. No se puede olvidar que aún hay en España más de tres millones de personas que están en el paro y que muchas ya no tienen derecho a la prestación de desempleo. En todo caso, en muchas comunidades autónomas ya se han alcanzado los niveles anteriores a la crisis y hay menos contratos temporales sobre el total de la población con trabajo que en el mejor año de la etapa de bonanza. Falta aún conseguir empresas más grandes, más internacionalización y más productividad, pero la recuperación es un hecho. Las cifras no se discuten, aunque algunos demagógicamente lo intenten.