OPINIÓN
EDITORIAL: Una revisión del callejero que sea útil, precisa y altamente eficiente
El Ayuntamiento de León gestiona ya la firma de un contrato de asistencia técnica para la actualización de los nombres de las calles de la ciudad, números y vados que le permita tener una referencia fiable y corregir una situación de cierto descontrol sobre una cuestión que históricamente nunca se ha afrontado con el mínimo de rigor que exige una solución que ni mucho menos es banal, aunque pueda parecerlo. Sirvan como ejemplo de la situación dos datos: en estos momentos hay treinta calles sin nombre y dos nombres asignados que sin embargo no tienen calles. El desorden afecta sobre todo a áreas de expansión urbana, pero no sólo: Ventas Oeste, Eras de Renueva, La Serna-La Granja, La Lastra, Los Juncales, Puente Castro, el Parque Tecnológico y los accesos al área comercial del entorno de Carrefour son los escenarios urbanos con mayores problemas.
El trabajo, que supondrá un coste para el Ayuntamiento de 21.000 euros y deberá estar terminado a mediados del próximo año, tiene por objeto crear un soporte digital y una base de datos fiable y de fácil consulta que sobre todo resuelva las dudas sobre los números y su ubicación y posibilite un control exhaustivo sobre la situación de los vados en todos los aspectos, incluso en la actualización del pago de la tasa anual por el uso de ese espacio.
El desarrollo de las nuevas tecnologías de la comunicación sustituyó los callejeros clásicos, entendidos como descripción gráfica que permitían localizar cualquier calle en un mapa, por guías para los aparatos móviles, medios al alcance de una mayoría de la población y en los que la fluidez y la precisión de la información son fundamentales para un buen servicio al ciudadano y, por supuesto, a la propia administración.