OPINIÓN
EDITORIAL: Aniversario con interrogantes en Las Médulas
Nadie puede cuestionar que la declaración de Las Médulas como Patrimonio de la Humidad es objetivamente un hecho muy positivo. El paraje consiguió situarse en un escaparate nacional e internacional que era impensable sin esa nominación de la Unesco. Pero desde aquel 4 de diciembre de 1997 ha transcurrido mucho tiempo y se mantienen demasiados interrogantes abiertos y, lo que es peor, nadie parece capaz de alcanzar un marco estable para la gestión adecuada del paraje. Las batallas entre instituciones, los egoísmos de territorios e incluso los intereses económicos para repartirse los beneficios directos que generan los miles de visitantes hacen a día de hoy inviable un nuevo tiempo de unidad.
La consejera Josefa García Cirac anuncia «un impulso» para unificar la gestión de Las Médulas. Pero a estas alturas cuesta mantener la esperanza de que se acabarán las ‘guerras’.