La comarca del Bierzo (y sus circunstancias)

E n estos pasados días de grandes nevadas, estuvo cerrada la comunicación con Galicia por Piedrafita do Cebreiro, sin embargo, la vía natural a través del cauce del río Sil, la que ya usaron los romanos hace dos mil años, está sin problemas para su uso. Bueno si, los problemas son los impuestos por el propio hombre, no por la Naturaleza en sí, que ya nos abrió esta puerta. La carretera N-536 está semicortada en Peñarrubia y la N-120 en los túneles de La Barosa, que frecuentemente están en obras, y no permiten una fluidez adecuada del considerable tráfico diario. Y ya llevan años en estas circunstancias, como se ha manifestado en prensa.

El ser una comarca privilegiada por nuestra climatología, nuestros recursos e incluso por nuestra situación geográfica, a la larga nos ha perjudicado en nuestras comunicaciones y viabilidad comercial, como se hace evidente en la actualidad. Ese fue incluso el motivo principal va casi para un siglo, en que nuestro Bierzo se transformó en provincia, por su difícil gestión administrativa desde la distancia.

Hoy, quien quede aislado en cuanto a infraestructuras viales, queda olvidado del mundo, y eso que se dice ¡que vivimos en el siglo de las comunicaciones! ¡Que el trabajo telemático nos permitirá residir en cualquier punto del planeta!

Pero el turismo, el transporte de mercancías, las empresas y todo tipo de negocios, solo se «colocan» en zonas de fácil comunicación, y sobre todo de fácil acceso. Ya vemos que el turista va mayoritariamente hasta donde llegue su coche.

Que curioso, que comarcas antaño ruinosas, que solo producían escasas yerbas para una ganadería de subsistencia y algo de grano, gracias a la construcción de pantanos en fértiles valles de montaña y la canalización de esa agua, han conseguido ser ahora la huerta de la Comunidad; y gracias a estar en zonas llanas y de fácil construcción de vías de comunicación, se han transformado en el centro neurálgico de nuestra sociedad. ¿Que pasaría si se cierra el grifo del agua como ocurre ya con las frecuentes sequías? ¿Y el de los recursos naturales que se aportan desde otras comarcas, por el peaje de la renombrada huella ecológica? El Bierzo aportó mucho a la supervivencia de otras regiones, dio mucha mano de obra, aportó mucho al PIB nacional … ¡cuando vivíamos en la ciudad del dólar!

El Estado debe equilibrar las desigualdades de sus ciudadanos, pero parece que vivimos en un país de privilegios, de favoritismos y de a veces absurdas inversiones, que no ayudan a todos por igual; y así, lo único que se consigue es fomentar las dos Españas, los nacionalismos, las rivalidades y las discrepancias entre convecinos.

Uno no puede entender por qué no se construyó esta autovía junto al río Sil en el pasado, cuando nuestra relación ancestral con el valle de Valdeorras, con la que se formó provincia, y con las ricas comarcas gallegas lo demandaba. ¿Por qué se está aún suplicando hoy por esta ruta de tanta importancia económica y social? ¿Por qué no se abre una vía de comunicación con el norte de Portugal, continuando hacia Asturias, donde un potencial de dos millones de ciudadanos nos puede visitar con frecuencia y poder fomentar nuestros recursos? ¿Por qué el AVE no pasa por el Bierzo, punto de encuentro y transición de las dos comunidades y de tanta importancia socioeconómica? ¿Por qué viviendo en una comarca tan privilegiada, nos sentimos tan abandonados?

El Bierzo es aun una rica fuente de recursos, solo necesitamos que la tecnología permita el uso adecuado de los mismos, y estaremos donde merecemos. No olvidemos que las fuentes de energía por las que ahora se apuesta, tienen los días contados.