Visita ‘dispersa’
La eurodiputada gallega Lidia Senra, que pertenece al grupo GUE/NGL —y se presentó por Alternativa Galega de Esquerda en Europa— visitó esta semana la prisión provincial de Villahierro. Quiso vivir la experiencia de quienes tienen que recorrer muchos kilómetros para reunirse con sus familiares. Se desplazó desde Santiago de Compostela para visitar a María Osorio, condenada a siete años de prisión por pertenecer a Resistencia Galega. Senra instó al Estado español a «abolir de una vez por todas» las políticas de dispersión penitenciaria, una fórmula avalada por todas las instancias y que ha sido muy eficaz para frenar el terrorismo en el país.
La eurodiputada criticó que esa dispersión provoca que reclusos gallegos se encuentren repartidos en diversas cárceles del territorio nacional a cientos de kilómetros de sus familias, que tienen que asumir un «mayor coste» para visitarlos.
Según explicó, viajó «los 400 kilómetros de ida y los de vuelta, el equivalente a unas ocho horas de conducción, con tramos en los que había nieve y dificultades para la buena circulación».
En realidad la ruta de Santiago a Mansilla es de 330 kilómetros y los rutómetros cifran en tres y horas y media el tiempo de desplazamiento.