Se veía venir
D ebe de ser cosa de la edad pero lo cierto es que nunca me creí que Manuela Carmena no fuera a repetir como candidata a alcaldesa de Madrid. Ya se sabe que el camino al cielo está empedrado de buenas intenciones, y puede que en su momento la alcaldesa de Madrid realmente no se planteara repetir, pero no conozco a nadie que se dedique a la política y que llegue a ostentar un cargo de responsabilidad que se apee del cargo voluntariamente.
Así que sin novedad en el Ayuntamiento de Madrid. Carmena competirá por seguir y lo hará bajo el paraguas de una agrupación de electores que es la manera de tener más independencia a la hora de mandar. Tampoco me cabe la menor duda de que el PSOE apoyará a Carmena para que continúe siendo alcaldesa. Es más, en realidad es la candidata que les gustaría tener a los socialistas. Y Carmena bajo las siglas PSOE incluso arrasaría. Pero la alcaldesa prefiere sumar socialistas a su agrupación de electores y no al revés. Y como Pedro Sánchez siente una sincera admiración por Carmena no le importará que siga al frente de Madrid. Otra cosa es que en la Federación Socialista Madrileña hay quienes piensan que no deberían de renunciar a presentar un candidato potente y al menos intentar ganar en vez de dar la partida por perdida.
Y es que es lógico que haya militantes y dirigentes del socialismo madrileño que no se quieran conformar con hacer de su partido un apéndice del proyecto de Carmena. Pero salvo que el PSOE sea capaz de encontrar un mirlo blanco, o el PP otro mirlo igualmente blanco, me parece a mí que la alcaldía quedara en manos de doña Manuela. Si los socialistas no parecen muy avispados en esto de competir por la alcaldía de Madrid, los populares le están a la zaga. Es comprensible claro, que los pesos pesados no quieran pasar de la política nacional al ayuntamiento sobre todo si la perspectiva es la de perder.
En cuanto a Begoña Villacís, hay que reconocer que se ha trabajado su papel de «opositora» al actual equipo gubernamental, en realidad Ciudadanos es la única oposición, porque el PSOE no hace oposición a Carmena y en cuanto al PP su oposición es irrelevante. Las urnas siempre pueden dar una sorpresa pero con Carmena como candidata las sorpresas serán pocas.