Carteros a toda mecha
El servicio postal universal, el que debe prestar Correos, se queda algo corto en alguna que otra localidad leonesa a tenor de las quejas que, a priori con razón, esgrimen los indignados vecinos de Ferreras del Puerto, pedanía de Valderrueda. La veintena de habitantes de esta localidad situada a unos 90 kilómetros de la capital asisten perplejos a la veloz asistencia del servicio de correspondencia, tanto que las puertas de la oficina sólo abren de 10.00 a 10.10 horas. Estos diez minutos serán de órdago para el aplicado funcionario al que le toque llevar a cabo el servicio, especialmente sabiendo que este mismo ritmo le esperará en todos los pueblos de su ruta, que será probablemente de un centenar de kilómetros recorriendo carreteras imposibles a lo largo de la montaña leonesa. Un plan nada envidiable que se repite un día tras otro, a lo mejor incluso aguantando a algún vecino malencarado porque los diez minutos se convierten en siete si se produce un imprevisto en el camino. Es el sino del medio rural.