Valía y valores

Desde Alcalá de Henares, me llega un libro que por su brevedad y excelencia me he leído de un tirón: Azaña, traductor, con sendos textos de Tierno Galván y de Moral Sandoval. Me lo hacen llegar dos amigos cervantistas: Arsenio Lope y Alfonso Dávila. De chaval leí «Memorias de un quinto de 1813», sobre las guerras napoleónicas, que don Manuel había traducido del francés, pues dominaba esta lengua, mientras que el inglés solo lo leía y escribía Tierno se muestra intrigado porque tradujese La esfera y la cruz, del católico Chesterton. Y es Moral quien aclara que no escogía las traducciones, se las encargaban. No obstante, apunto, el corazón es capaz de sentir sutiles afinidades. Para completar la lectura, vuelvo a sacar de la Biblioteca Pública un libro -de 2003- perteneciente a una colección en la que dos autores, uno de izquierdas y otro de derechas, escriben sobre un mismo personaje histórico, en este caso de Azaña: el diplomático Fernando Morán y el economista Velarde Fuertes. Alguien ha plasmado a lápiz: «Morán eres tan memo escribiendo como de ministro. No dices nada, ni lo sabes explicar. Lector, estás avisado». En el mezquino anónimo percibo el eco de aquellos ignominiosos chistes contra el ministro de Exteriores, fabricados en un despacho. Por cierto, nadie fue caricaturizado e insultado con más saña que Azaña.

Resulta imprescindible jerarquizar bien los méritos para acceder a los puestos directivos. Ojo, tanto los méritos profesionales como los humanos. Asistí a la intervención de Sáenz de Santamaría y al posterior coloquio sobre mujer y Universidad. Ni un ápice de maniqueísmo, pero a la vez hubo en todas las voces la firme convicción de que queda mucho camino por recorrer. Eso de «el que tenga más mala leche… para cabo» es un modelo ya caduco. Ni para caba, claro. Valía y valores.

Tierno barruntaba que Azaña pudo tener complejo de feo. No lo sé. Pedro Sánchez lo tiene de guapo, a juzgar por la forma en que nos mira desde la portada de su libro. Unos se pasan y otros no llegan, pero la consecuencia no suele ser la misma. En efecto, valía y valores deben conformar el currículo que importa. Y en igualdad.