Fuego amigo

Los españoles somos como somos —incluso los que reniegan de serlo— y pocas cosas hay tan efectivas como que nos digan lo que debemos hacer para que enfilemos en dirección contraria. Entre los padres, cónyuges, hijos, compañeros, vecinos... existen incontables casos de quienes confiesan que cuando se espera algo de una persona lo mejor es sugerirle una alternativa.

Y en la escasa, rara y cuestionable experiencia de las elecciones primarias de los partidos se cumple perfectamente esa sospecha. En cuanto la dirección se pronuncia en un sentido los militantes suben la puerta levadiza para atrincherarse haciendo bueno eso de que en casos de crisis surgen extraños compañeros de cama.

Aunque realmente sirve para poco porque luego vienen los dedazos, como el que se temen en el PSOE leonés, el que podría ‘reciclar’ a Silvia Clemente en Ciudadanos o más directamente en el PP leonés, donde se han limitado a engrasar bien las bisagras para recibir con todas las reverencias lo que designen desde Génova.

La ciudadanía aguarda esas listas en unas elecciones probablemente inciertas, aunque si se cumplen los augurios será el fuego amigo el que determine el ocupante de La Moncloa.

Cuando surgió el 15-M el inquilino era aún Zapatero. En UGT no les gustó que se cuestionase un libro de texto escolar que dice lo contrario y que situaba la capital de ésta nuestra autonomía en Valladolid. Ya se sabe, las famosas ‘fake’ van por barrios...

Aquella irrupción de Podemos llevó al PSOE a niveles de mínimos históricos. Con todo el aparataje de la derecha dando aire al asunto para engordarlo. Y ahora, como la risa va por barrios, es la irrupción de Vox la que ha puesto patas arriba el ‘establishment’ de la derecha. Atizan el fuego desde el banco contrario y lo curioso es que la derecha-derecha —en la que no faltan ultras— amenaza con convertirse en perro del hortelano para dejar a Pedro Sánchez en La Moncloa. Los gurús vaticinan que Ciudadanos, tras la torpeza de Albert Rivera propiciando la moción de censura y con su trayectoria que parece de goma rellenando listas con rebotados, entrará en barrena engullido por Vox.

En León hay 4 diputados. Sin Vox se apuntaba a un 2 PP, 1 PSOE y 1 Ciudadanos. Y el fuego amigo de la derecha atiza un 1 PP, 2 PSOE y 1 Podemos.