Pobre se nace... ¿o se hace?

Se fueron ya los food trucks, los escenarios y el jadeo constante de las calles. Simultáneamente, a Ponferrada llegaba la fiesta. Merecidísima. Retorna la rutina y Cruz Roja León presentó ayer a la nueva presidenta del comité provincial: María Victoria Seco Fernández. «No me he podido negar porque es una causa noble». Cierto es, ya que ninguno de los presidentes cobra por ello, sea de la demarcación administrativa que sea. Cruz Roja ha hablado para decir bien alto y claro, durante las fiestas de San Juan y San Pedro, que en León la pobreza se cronifica —fenómeno por el que un proceso negativo, problema, o enfermedad, se padece a lo largo de mucho tiempo—. Es decir, las 39.368 necesitadas almas que fueron atendidas en 2018 eran los mismos rostros que el año anterior. Así lo aseguró quien es ahora ex-presidente de la ONG argumentando que «es muy difícil salir de la pobreza». También es cierto. Pero para salir primero hay que entrar.

Ante el panorama se encendió la bombillita con interrogante incluido. ¿Pobre se nace, o se hace? Se admiten las dos. Que te toque ya desde casa pasar hambre. Invierno sin calefacción. No-Netflix, no-móvil, no-PS4. Exclusión social. ¿Igualdad de oportunidades? La segunda, más normalizada desde que terminó la crisis, es que te conviertas en pobre. De hecho el gobierno español debería patrocinarlo con un eslogan tipo «¡Hazte pobre!» en el que el subtítulo anuncie «Las rentas del 20% más rico multiplican por 6,6 las del 20% más pobre» o «en España el 1% de la población acapara el 40% de la riqueza». Al final meme y carita sonriente. ¿Les hace gracia?

A mí ninguna. Llevo toda la vida observando cómo actúa la desigualdad. Las cicatrices que deja. Y cómo el monstruo se ha ido convirtiendo en dinosaurio cortesía de un sistema capitalista neoliberal. ¿Cuando fuisteis a ver la Giralda de Sevilla no os dio por echar un vistazo al barrio de Los Pajaritos? ¿No salís de paseo con los niños por el barrio de ‘Corea’? ¿En serio? Di que tampoco hace falta ir a los barrios considerados ‘conflictivos’ para ver pobreza. En el contenedor de enfrente de casa un hombre mayor, de cara curtida y mirada limpia, cada noche, pasada la una de la madrugada aparece para buscar algo de comida. Deja un palo sujetando la tapa y así puede entra para obtener las mejores sobras. El otro día en la Plaza Puerta Obispo tres mendigos se enzarzaron en una pelea bochornosa. Y supongo que alguna vez en vuestra vida os habréis topado con la paradoja de ir a sacar dinero al banco en el que intenta descansar un sin techo. Si los pobres son incapaces de escapar de esa pesadilla como apuntó Cruz Roja, las administraciones, la sociedad y las autoridades deberán actuar. Mientras tanto, tú que puedes —siéntete privilegiado— sigue yendo a los food trucks a por una hamburguesa de 8 ‘pavos’.