EN BLANCO
2050
LOS THINK-TANKS más solventes y las Cancillerías más organizadas han llegado a la conclusión de que en el 2050 habrá seis grandes potencias en un planeta multipolar: Estados Unidos, Brasil, Japón, China, India y Rusia. Dos americanas y cuatro asiáticas, si incluimos a Rusia en esta última posición geográfica. ¿Y Europa? Nuestro continente seguirá siendo un conjunto de estados en donde unos treinta mantendrán su pertenencia a la Unión Europea. Cada uno seguirá hablando su propia lengua, en todos la común será el árabe y la Unión Europea en su conjunto seguirá sin política exterior y de defensa comunes y teniendo miedo a todo. Casi como ahora. El actual peso del Reino Unido, Francia y Alemania habrá decaído, y si los dos primeros siguen siendo miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, manteniendo la capacidad de veto, será que el Consejo pinta poco o que han entrado Japón, India y Brasil en igualdad de condiciones. De las seis previsibles grandes potencias, la única que a día de hoy arroja sombras de inestabilidad es Rusia, dado el control de las mafias sobre importantes partes de la actividad industrial, económica, energética y hasta de defensa. Por debajo de estos gigantes habrá potencias militares con capacidad de destrucción nuclear, entre las que se encontrarán, junto a las actuales oficiales y las no declaradas, como Israel y Corea del Norte, Japón, Irán, y posiblemente Arabia Saudita y Egipto. Si estos dos últimos países intentasen ser los primeros Estados árabes en poseer el arma nuclear, otros vecinos harían lo mismo, llegando la corriente a todo el Magreb, incluido Marruecos, que la fabricaría para defenderse de Argelia, que previamente la habría tenido para defenderse de Libia porque como ha quedado meridianamente claro desde hace años, la estrategia de Estados Unidos para asegurar la no proliferación nuclear está dañando los intereses de seguridad que prendía defender, ya que los Estados aspiran a tener armas nucleares cuando se sienten inseguros. ¿Y si Marruecos la tuviese para contrarrestar a Argelia, qué tendría que hacer España?