La «rentabilidad» del mercado del Conde La «rentabilidad» del mercado del Conde

Decía la prensa local en recientes titulares «El Ayuntamiento duda que reformar el mercado de abastos sea rentable». Como vecina de León y por poner tres ejemplos digo: -Dudo que sea rentable construir el estadio de fútbol antes de tener equipo. -Dudo que sea rentable sufragar las obras de cubrición de la plaza de toros para que una empresa privada explote el recinto. -Creo que meter al río Bernesga en una «artesa hormigonada» entre el puente de San Marcos y la plaza de toros, es un atentado ecológico perpetrado con dineros de Europa y con toda seguridad rentable para algunos, pero dudosamente rentable para la ciudad de León, que ha perdido una parte de su patrimonio natural. Como vecina y comerciante del casco histórico llevo años esperando la reforma del mercado del Conde y por eso siguiendo las noticias locales quiero decir lo siguiente: -Dudo que sea rentable construir un aparcamiento subterráneo en la plaza Mayor con el fin de vender sus plazas (255) a unos residentes cada vez más escasos, porque el barrio resulta cada vez más inhabitable debido al ruido nocturno y al vandalismo. Dudo que sea incluso legal derribar un tramo completo de muralla (3 metros de ancho por 5 metros de alto) para ejecutar el acceso a este aparcamiento. Además es a todas luces insensato hacer estas obras después de suprimir el tráfico de calle Ancha y el resto del casco histórico. Si la corporación municipal inauguró oficialmente estas obras en las pasadas fiestas de San Juan poniéndolas en servicio durante unos días: ¿Por qué sigue cerrado a fecha de hoy? y si algunos vecinos y hosteleros han adquirido ya sus plazas de aparcamiento, ¿por qué no pueden estar haciendo uso de ellas?... Pero volvamos al mercado del Conde y a su «rentabilidad»: el 27 de agosto el concejal Vallejo aseguraba en declaraciones a la prensa que «el edificio del mercado y su actividad es fundamental para dar vida al casco histórico» y que en cualquier caso la solución debía estudiarse junto a la concejala de Comercio, la leonesista Covadonga Soto. Asistí a la reunión de 8 de marzo de 2002, donde la concejala de Comercio y el gerente de Mercados expusieron a representantes de los vecinos, comerciantes del entorno y responsables del Centro Comercial Abierto, el proyecto de rehabilitación propuesto por los vendedores titulares del Conde y actualmente en fase de redacción por parte de los técnicos municipales, proyecto que todos los asistentes dimos muestra de aprobación y animamos a su urgente puesta en marcha. Por eso me parece indignante que el concejal de Urbanismo, considerando esta rehabilitación «vital para el Casco Histórico» no haya encontrado tiempo de ocuparse de ella, comenzando por reunirse con la edil de Comercio. Quizá sea conveniente recordar que durante los meses de mayo y junio de 2001 todas las asociaciones del Casco Histórico: vecinos, hosteleros y comerciantes; todas las asociaciones de Consumidores de la ciudad y todas las asociaciones del Comercio Tradicional de León, se manifestaron por escrito sobre el Mercado del Conde: sobre su rentabilidad social y económica y sobre la necesidad urgente de su remodelación. A. Murciego (León). Decía la prensa local en recientes titulares «El Ayuntamiento duda que reformar el mercado de abastos sea rentable». Como vecina de León y por poner tres ejemplos digo: -Dudo que sea rentable construir el estadio de fútbol antes de tener equipo. -Dudo que sea rentable sufragar las obras de cubrición de la plaza de toros para que una empresa privada explote el recinto. -Creo que meter al río Bernesga en una «artesa hormigonada» entre el puente de San Marcos y la plaza de toros, es un atentado ecológico perpetrado con dineros de Europa y con toda seguridad rentable para algunos, pero dudosamente rentable para la ciudad de León, que ha perdido una parte de su patrimonio natural. Como vecina y comerciante del casco histórico llevo años esperando la reforma del mercado del Conde y por eso siguiendo las noticias locales quiero decir lo siguiente: -Dudo que sea rentable construir un aparcamiento subterráneo en la plaza Mayor con el fin de vender sus plazas (255) a unos residentes cada vez más escasos, porque el barrio resulta cada vez más inhabitable debido al ruido nocturno y al vandalismo. Dudo que sea incluso legal derribar un tramo completo de muralla (3 metros de ancho por 5 metros de alto) para ejecutar el acceso a este aparcamiento. Además es a todas luces insensato hacer estas obras después de suprimir el tráfico de calle Ancha y el resto del casco histórico. Si la corporación municipal inauguró oficialmente estas obras en las pasadas fiestas de San Juan poniéndolas en servicio durante unos días: ¿Por qué sigue cerrado a fecha de hoy? y si algunos vecinos y hosteleros han adquirido ya sus plazas de aparcamiento, ¿por qué no pueden estar haciendo uso de ellas?... Pero volvamos al mercado del Conde y a su «rentabilidad»: el 27 de agosto el concejal Vallejo aseguraba en declaraciones a la prensa que «el edificio del mercado y su actividad es fundamental para dar vida al casco histórico» y que en cualquier caso la solución debía estudiarse junto a la concejala de Comercio, la leonesista Covadonga Soto. Asistí a la reunión de 8 de marzo de 2002, donde la concejala de Comercio y el gerente de Mercados expusieron a representantes de los vecinos, comerciantes del entorno y responsables del Centro Comercial Abierto, el proyecto de rehabilitación propuesto por los vendedores titulares del Conde y actualmente en fase de redacción por parte de los técnicos municipales, proyecto que todos los asistentes dimos muestra de aprobación y animamos a su urgente puesta en marcha. Por eso me parece indignante que el concejal de Urbanismo, considerando esta rehabilitación «vital para el Casco Histórico» no haya encontrado tiempo de ocuparse de ella, comenzando por reunirse con la edil de Comercio. Quizá sea conveniente recordar que durante los meses de mayo y junio de 2001 todas las asociaciones del Casco Histórico: vecinos, hosteleros y comerciantes; todas las asociaciones de Consumidores de la ciudad y todas las asociaciones del Comercio Tradicional de León, se manifestaron por escrito sobre el Mercado del Conde: sobre su rentabilidad social y económica y sobre la necesidad urgente de su remodelación. A. Murciego (León).