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dxdx el Islam Réplica en Veguellina Un artículo que le hizo disfrutar Europa y el Islam Réplica en Veguellina Un artículo que le hizo disfrutar

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León

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¿Existe antagonismo entre religiones y civilizaciones? ¿Se han terminado las guerras religiosas que han ennegrecido tantos siglos? ¿Es posible un diálogo entre la Unión Europea y los países del Islam? Este último punto sería fundamental para rebajar tensiones, cuyas causas son múltiples y que ciertos grupos esgrimen para justificar la violencia terrorista. «Según se es, así se ama», decía Ortega. «Según se es, así se actua, según se cree así se obra», doctrina de Santo Tomás. ¿Cómo cooperar al bien común desde supuestos antagónicos? ¿Qué comprensión y confianza puede generar el reto de un líder musulmán que presume de invadir Europa, arropado por la democracia de ésta, y dominarla con su religión inamovible y la de la Unión fluctuante y movediza? ¿Qué respeto a la persona, primordial como dice el músico judío Daniel Barendoin que armoniza un conjunto Palestino-Israelí, cuando sólo considera, al Islam, digno al hombre de doblar el espinazo entre Alá y la mujer es relegada a 5.º orden de derechos? ¿cómo integrará la Unión a unos inmigrantes fanáticos, integristas y que no mueven una coma del Corán que cito de nuevo, Sura IX, números 5 y 29 donde afirma: «Matad a los idólatras donde quiera que los halléis hacerles prisioneros, sitiadles y acechadles... haced la guerra a los que no creen en Alá ni en el día último, a los que no consideran prohibido lo que Alá y su apóstol Mahoma han prohibido? Anatolio Calle (León).Una vez más se ha puesto en evidencia la labor de los sanitarios locales y de las autoridades de Veguellina de Orbigo por un habitante de esa localidad. Y yo, como sanitario local y habitante de esa localidad, voy a demostrarle lo equivocado que está usted, no sólo en la crítica de la labor sanitaria -la cual tiene todo su derecho de hacerla- sino también en el hecho de poner en entredicho a toda la localidad para que no acudan ni a residir ni siquiera a veranear. Para corroborar esto le voy a contar dos casos, anécdotas verdaderas, ocurridos este verano: Una madre llama a sus hijos, residentes en Valladolid y Vigo, para decirles que no vengan a Veguellina por culpa de esos problemas gastrointestinales, a los que ambos hijos le contestas que no se preocupen que lo están padeciendo -uno- o ya la han pasado -el otro-. El otro caso es del paciente que acude al Hospital de León y le comunica al doctor de urgencias que es de Veguellina -con guasa- a lo que el doctor le contesta que guarde la cola que los demás pacientes de ese día tenían el mismo problema y no eran de Veguellina. Como ve no es un problema local sino autonómico y/o estatal. Ángel Santiago Martínez Freire. Veguellina de Orbigo. El motivo de decidirme a escribirles es un artículo publicado el 16-07-02 de Enrique Alonso Pérez y titulado «León, hace medio siglo». Gracias, él me hizo recordar muchas cosas del pasado y francamente disfrute con su lectura. Pero tiene una inexactitud que quisiera reseñar. En el artículo se dice: «... hoy un edificio de Telefónica. El espacio siguiente pertenecía a la familia Fierro». Esto no es cierto. Los chalets eran y por este orden, el de Emilio Hurtado, mi abuelo Dionisio González y después el de la familia Fierro. Si se habla de las «familias» industriales o adineradas de la época, no se puede omitir a Dionisio González El Minero. Tomás González Pérez de Ayala (correo electrónico). ¿Existe antagonismo entre religiones y civilizaciones? ¿Se han terminado las guerras religiosas que han ennegrecido tantos siglos? ¿Es posible un diálogo entre la Unión Europea y los países del Islam? Este último punto sería fundamental para rebajar tensiones, cuyas causas son múltiples y que ciertos grupos esgrimen para justificar la violencia terrorista. «Según se es, así se ama», decía Ortega. «Según se es, así se actua, según se cree así se obra», doctrina de Santo Tomás. ¿Cómo cooperar al bien común desde supuestos antagónicos? ¿Qué comprensión y confianza puede generar el reto de un líder musulmán que presume de invadir Europa, arropado por la democracia de ésta, y dominarla con su religión inamovible y la de la Unión fluctuante y movediza? ¿Qué respeto a la persona, primordial como dice el músico judío Daniel Barendoin que armoniza un conjunto Palestino-Israelí, cuando sólo considera, al Islam, digno al hombre de doblar el espinazo entre Alá y la mujer es relegada a 5.º orden de derechos? ¿cómo integrará la Unión a unos inmigrantes fanáticos, integristas y que no mueven una coma del Corán que cito de nuevo, Sura IX, números 5 y 29 donde afirma: «Matad a los idólatras donde quiera que los halléis hacerles prisioneros, sitiadles y acechadles... haced la guerra a los que no creen en Alá ni en el día último, a los que no consideran prohibido lo que Alá y su apóstol Mahoma han prohibido? Anatolio Calle (León).Una vez más se ha puesto en evidencia la labor de los sanitarios locales y de las autoridades de Veguellina de Orbigo por un habitante de esa localidad. Y yo, como sanitario local y habitante de esa localidad, voy a demostrarle lo equivocado que está usted, no sólo en la crítica de la labor sanitaria -la cual tiene todo su derecho de hacerla- sino también en el hecho de poner en entredicho a toda la localidad para que no acudan ni a residir ni siquiera a veranear. Para corroborar esto le voy a contar dos casos, anécdotas verdaderas, ocurridos este verano: Una madre llama a sus hijos, residentes en Valladolid y Vigo, para decirles que no vengan a Veguellina por culpa de esos problemas gastrointestinales, a los que ambos hijos le contestas que no se preocupen que lo están padeciendo -uno- o ya la han pasado -el otro-. El otro caso es del paciente que acude al Hospital de León y le comunica al doctor de urgencias que es de Veguellina -con guasa- a lo que el doctor le contesta que guarde la cola que los demás pacientes de ese día tenían el mismo problema y no eran de Veguellina. Como ve no es un problema local sino autonómico y/o estatal. Ángel Santiago Martínez Freire. Veguellina de Orbigo. El motivo de decidirme a escribirles es un artículo publicado el 16-07-02 de Enrique Alonso Pérez y titulado «León, hace medio siglo». Gracias, él me hizo recordar muchas cosas del pasado y francamente disfrute con su lectura. Pero tiene una inexactitud que quisiera reseñar. En el artículo se dice: «... hoy un edificio de Telefónica. El espacio siguiente pertenecía a la familia Fierro». Esto no es cierto. Los chalets eran y por este orden, el de Emilio Hurtado, mi abuelo Dionisio González y después el de la familia Fierro. Si se habla de las «familias» industriales o adineradas de la época, no se puede omitir a Dionisio González El Minero. Tomás González Pérez de Ayala (correo electrónico).